Fernández Díaz reprocha al PSOE que no condene los escraches a cargos del PP

Madrid, 23 abr.- El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha reprochado hoy al PSOE que no vea "antidemocráticas" las acciones de "clara coacción, presión, intimidación y hostigamiento" que están sufriendo cargos del PP y ha lamentado que los socialistas solo las condenarían si fueran contra miembros de su partido.

Fernández Díaz ha respondido así en la sesión de control en el Senado a la pregunta del senador del PSOE Enrique Cascallana, quien ha pedido al ministro su opinión sobre las declaraciones de la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, que vinculó la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) con "grupos filoetarras" que siguen una estrategia "bastante radical".

El ministro ha comenzado su respuesta diciendo que comparte "plenamente" la opinión de Cifuentes, aunque no ha vinculado al colectivo con "grupos filoetarras", tras lo cual ha dicho refiriéndose a los escraches que son comportamientos "radicalmente antidemocráticos".

Ante esta respuesta el senador Cascallana ha acusado a Fernández Díaz de seguir una técnica de "crispación" a la ciudadanía al calificar a todos los colectivos sociales de antisistema.

"Así se dirige un país, yo pensaba decirle que rectificase pero usted no merece estar sentado en esta cámara y tienen que reconocer que manifestarse es un derecho legítimo", ha añadido el senador socialista, que se ha mostrado convencido de que con estas actitudes no se va a frenar la contestación en la calle.

En la réplica, Fernández Díaz ha reiterado sus palabras y, tras pedirle a Cascallana que no manipulase sus palabras, ha subrayado que comparte "plenamente con la delegada del Gobierno su opinión de que estamos ante unos hechos radicalmente antidemocráticos".

"¿O es que usted no lo comparte?", ha preguntado el titular de Interior, que ha cuestionado si el senador se manifestaría en contra de estos actos si fueran dirigidos contra sus compañeros.

Unos comportamientos que, a juicio del ministro, no se pueden permitir porque cualquier cargo público tiene el deber de actuar con libertad y sin coacciones aunque no se comparta sus opiniones.

"Estaría usted de acuerdo si se estuviera haciendo lo mismo con sus compañeros de bancada, yo diría lo mismo y diré lo mismo pero lamentablemente usted no", ha concluido Fernández Díaz.