Las autoridades de Indonesia han cerrado al menos once páginas por su contenido radical y clausurado varias cuentas en redes sociales tras el atentado del pasado jueves en el que murieron siete personas --entre ellas los cinco atacantes-- y otras 30 resultaron heridas, una acción reivindicada por el Estado Islámico.
Las autoridades aseguran que han aparecido cuentas en Facebook apoyando el atentado. "Estamos examinando a varias páginas y denuncias públicas presentadas al respecto", ha indicado un portavoz del Ministerio de Comunicaciones del Gobierno indonesio, Ismail Cawidu.
El Gobierno ha remitido además cartas a las empresas de redes sociales como Facebook, Twitter y Telegram pidiendo que se bloquee o retire de inmediato el material "radical", ha señalado Cawidu.
El cerebro del atentado parece ser un ciudadano indonesio que combate en las filas del Estado Islámico en Siria que habría aprovechado sus cuentas en las redes sociales para difundir la ideología yihadista y para comunicarse con sus contactos en Indonesia a través de sus publicaciones y mediante aplicaciones de mensajería instantánea.
El viernes, la Policía informó de que se ha identificado a dos de los atacantes mientras continúan activas varias operaciones en distintos puntos del país para intentar localizar a más implicados. El Gobierno reconoce que podría haber hasta un millar de simpatizantes del Estado Islámico en Indonsia.
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