Esta situación se ha convertido en un gesto de protesta contra la Junta Militar que gobierna el país desde 2014, y que ha encontrado en los monjes budistas a uno de los principales grupos de oposición.
Así, el primer ministro del país, Prayuth Chan Ocha, ha decretado el reemplazo del actual responsable de coordinación entre Gobierno y monjes por un oficial del Departamento de Investigaciones Especiales, el mismo que está coordinando las operaciones en el templo en busca del antiguo abad Phra Dhammachayo, según informa el boletín oficial 'Royal Gazette'
El religioso se enfrenta a cargos de fraude y de apropiación ilegal de terrenos para construir centros de meditación. Sus partidarios aseguran que se trata de una persecución política por parte de una Junta que ha silenciado a toda la oposición visible durante los últimos tres años.
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