Nace Esperanza, la hija de uno de los mineros atrapados en Chile

  • Uno de los 33 mineros atrapados desde el pasado 5 de agosto en el yacimiento San José, en el norte de Chile, conoció hoy a su hija recién nacida gracias a la fibra óptica que los expertos instalaron a 700 metros de profundidad.
Agencias

Ariel Ticona, uno de los 33 mineros atrapados en la mina de San José desde principios de agosto, ha sido padre. Ha podido ver a su pequeña, llamada Esperanza, gracias a la fibra óptica que el equipo de rescate instaló a 700 metros de profundidad, a través de la cual se pudo transmitir el parto.

"Derramó lágrimas y se conmovió mucho al ver las imágenes", señaló a los periodistas Cristián, hermano del minero y encargado de grabar el parto. María Yáñez, abuela de la recién nacida, se mostraba "un poquito triste porque mi hijo no presenció el parto de su hija; me hubiera gustado que hubiera estado él, pero no se puede. Ya va a ver el video para que esté más contento", comentó.

Elizabeth Segovia, madre de la criatura, se mostró tranquila y con paciencia para esperar su vuelta. "Estoy bien para enfrentar esto sola y él me da la tranquilidad a través de cartas", declaró ante los medios locales.

La evolución del rescate

Mientras tanto, prosiguen las labores de rescate. El denominado 'Plan B', en el que se utiliza la perforadora T-130 a la que los familiares de los mineros llaman "la milagrosa", sufrió una avería el sábado cuando se le rompió el taladro al topar con un trozo de hierro a 268 metros de profundidad.

Sin embargo, este 'plan B' volverá a reactivarse esta misma medianoche o mañana, ya que está funcionando mejor que la primera taladradora, la 'Strata 950', que de momento ha alcanzado 30 metros menos de profundidad y que tendrá que detenerse durante unos días cuando alcance los 300 metros por labores de mantenimiento.

Para el rescate se intentó un acceso fallido por un conducto de ventilación y actualmente se trabaja en tres vías simultáneas para intentar sacar a los mineros. Mientras progresan las labores de rescate, las autoridades siguen vigilando la salud de los mineros y preparándolos físicamente, aunque el rescate podría tardar algunos meses.

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