Allá a lo lejos en el municipio de San José (al este de Tegucigalpa, la capital hondureña) vive el pequeño Melvin Alexis Osorto Núñez, quien este año asistirá al cuarto grado.
De lunes a viernes este alumno de excelencia académica tiene que recorrer hora y media de camino para llegar a la escuela Manuel Bonilla.
En cada estación veraniega (como la que vive ahora el hemisferio sur) los rayos de sol van dejando huella en su carita trigueña. El polvo del camino árido y escabroso se va adhiriendo a sus pies descalzos y a su descolorida ropa, pues siempre ha carecido de uniforme.
Además del estudio, Melvin tiene que cumplir con las tareas domésticas. Entre éstas, recorrer grandes distancias para acarrear agua, tan escasa en las comunidades del sur del país. Melvin Alexis y sus compañeros de escuela se cuentan entre los favorecidos por la campaña Soli-Diario, la Maratón del Saber.
Nos encontramos a las puertas del año lectivo en Honduras y atendiendo el compromiso social asumido con la niñez de tierra adentro, el diario El Heraldo (con quien lainformacion.com colabora en contenidos editoriales) se prepara para la séptima edición de La Maratón del Saber.
Apuesta por la educación
"Hace apenas unos días dibujamos en las caritas inocentes de los niños enormes sonrisas, al hacerles entrega de juguetes en la temporada de Navidad", afirma Patricia Cálix, redactora de El Heraldo.
"Hoy, como parte de nuestro reto, queremos apostarle a la educación y llevar a los menores los útiles que les permitan iniciar el año escolar en este 2011", añade.
En esta ocasión, la meta es satisfacer las necesidades de 7.000 escolares diseminados en lugares postergados del interior de la tierra hondureña.
"Con la campaña Soli-Diario, La Maratón del Saber se ha contribuido a bajar los niveles de analfabetismo, además se ha constituido en una esperanza para los niños de escasos recursos y en esta ocasión esperamos cubrir las solicitudes de las escuelas que nos lleguen", informa María Ortiz, coeditora de la sección Metro del periódico hondureño.
A lo largo de siete años desde el diario afirman haberse encontrado con innumerables historias de pequeños de varias comunidades a quienes han "rescatado de la deserción y el ausentismo de sus centros educativos".La caravana de Soli-Diario, que es acompañada por las mascotas Don Lápiz y Don Borrador, ha beneficiado a más de 40,000 menores, informa la organización.
A cambiar la vida
"En cada una de las entregas solidarias nos hemos detenido para contemplar la alegría que se dibuja en los rostros de los niños cuando hemos cambiado la gastada bolsa plástica, donde llevan apenas un cuaderno y un pedazo de lápiz, por una mochila", afirma Cálix.
Este proyecto de compromiso con la educación de la niñez desprotegida se realiza también gracias a la colaboración de numerosas organizaciones y empresas bancarias o relacionadas con la educación.
La sección Metro de El Heraldo se compromete a "cruzar ríos, cerros, montañas o caminos de herradura para dárselos a un niño o niña que los necesita".
*(Noticia redactada en colaboración especial entre Elheraldo.hn y lainformacion.com).
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