Una ONG documenta las agresiones sexuales que sufren migrantes en Marruecos

Madrid, 29 nov.- La organización Women's Link Worlwide ha documentado en un informe casos de violaciones sexuales y víctimas de trata entre las mujeres migrantes en Marruecos, que al quedar embazadas abortan, en la mayoría de los casos obligadas, al margen de los servicios de salud.

La investigación "Mujeres migrantes en la clandestinidad: el aborto en Marruecos" aporta algunos datos tras el seguimiento a 55 mujeres durante un año y medio que vivían en Tánger y entrevistas con representantes de 16 organizaciones marroquíes e internacionales que atienden a las mujeres migrantes y con seis líderes de comunidades migrantes.

Respecto al estudio de la vida de las mujeres, expone que se produjeron una media de tres abortos mensuales -fruto de embarazos tras sufrir violencia sexual- y que más de la mitad (29 víctimas) no tuvieron oportunidad de tomar la decisión.

"De esos casos, en 18 la decisión fue del patrón de la red, en 12 abortaron por la presión de la organización que les extorsiona y en el resto obligadas por los 'novios' y 'maridos de camino'", ha detallado la directora ejecutiva de la organización, Viviana Waisman.

La mayoría de las mujeres migrantes incluidas en el estudio proceden de Nigeria y de República Democrática del Congo y gran parte dependen de la mendicidad, de la prostitución, o soportan un "marido del camino" para subsistir en ese país de tránsito en su proyecto migratorio.

El trabajo analiza la situación de estas migrantes en las ciudades de Tánger, Casablanca, Oujda, El Aaiún y Dakhla y concluye que o no tienen posibilidad de ser atendidas en la sanidad pública o si existe esa cobertura, deben ser acompañadas por una organización social.

Explica que las migrantes desconocen las prestaciones sanitarias en Marruecos y que la mayoría no se quiere exponer al riesgo de ser identificada, lo que supondría la expulsión del país.

Además, las mujeres carecen de dinero para pagar la asistencia hospitalaria que no está cubierta por el Estado, lo que provoca que muchas de ellas sean sometidas a "abortos inseguros" o al margen de los servicios sanitarios, que son la causa de muerte del 13 por ciento de las mujeres en el mundo, ha explicado Mónica Roa, directora de programas de la ONG.

El informe relata que la mayoría de las mujeres consumen para abortar "el misoprostol", un fármaco que compran en el mercado negro y que se utiliza de manera inapropiada, poniendo en muchos casos en riesgo sus vidas.