Un niño de 18 meses fue rescatado esta semana por unos pescadores turcos en el mar Egeo. En un primer momento, los marineros pensaron que el pequeño, de origen sirio, había fallecido, pero al darse cuenta de que estaba vivo lo subieron rápidamente al barco, donde le asistieron inmediatamente.
Además del niño, los marineros también encontraron a otros 14 refugiados sirios que tenían puestos sus chalecos salvavidas, tal y como recoge el diario The Guardian. "Estaba palido y pensamos que se trataba de hipotermia. Tenía las manos y pies blancos y escupía espuma por la boca. Lo cubrimos con una manta e intantamos salvarle", explicó el capitán Tecep Evran sobre este incidente.
Según las autoridades turcas, unos 16 refugiados sirios habrían desaparecido y dos habrían muerto en el naufragio de dos embarcaciones que se dirigían a Grecia atravesando el mar Egeo. Entre los 14 que fueron rescatados junto al niño – que se está recuperando en un hospital en Turquía -, se encontraba una mujer embarazada.
La madre del pequeño ha señalado que las personas que les embarcaron les prometieron un barco más grande. "Estuvimos todo el viaje muertos de miedo", indicó la madre del pequeño, que agradeció a los pescadores, que poco después visitaron al niño en el hospital donde se encuentra.
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