En China estudiar no está al alcance de cualquiera y muchos estudiantes deben de pedir préstamos para poder costearse sus estudios, pero el precio que algunos de estos estudiantes deben pagar por no devolver el dinero adeudado en el plazo estipulado, normalmente unos miles de dólares, puede ser demasiado alto según la investigación del diario editado en Pekín Youth Daily, que difunde BBC Mundo y deben de sufrir la humillación de la extorsión sexual.
Los prestamistas, en numerosas ocasiones, utilizan la venganza pornográfica en internet para presionar a las estudiantes que se retrasan en la devolución de los créditos, que normalmente tienen unos intereses abusivos de hasta el 30%. Y es que los usureros exigen a las chicas que les entreguen, para concederles el préstamo, fotos desnudas con el número de su documento de identidad como 'garantía'.
Si las estudiantes se retrasan en el pago los prestamistas, en una práctica que cada vez se estás extendiendo más según la investigación del diario pekinés, les chantajean amenazándoles con publicar sus fotos en internet y con enviarlas a sus familiares y amigos. Además, aumenta desproporcionadamente la cuota de interés. Incluso, en algunos casos, estudiantes han reconocido que la presión de los usureros ha llegado hasta la coacción sexual.
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