OPINION

La somera y apasionante historia del mullet, un peinado prohibido en Irán

familia jevi
familia jevi

Los regímenes totalitarios saben perfectamente que la subversión empieza por el peinado. Los grises, la policía franquista, perseguía a los melenudos, en tanto Corea del Norte adoctrina desde la TV a sus ciudadanos sobre el peinado “como mandan los cánones del socialismo”. La república islámica de Irán ha prohibido que los peinados occidentales en la cabeza de los varones, incluyendo las colas de caballo, el pelo largo y el nunca bien ponderado mullet, el estilo predominante en lugares tan variopintos como Alemania y las Vascongadas.

La prohibición del mullet proviene del Ministerio de Cultura iraní, organismo que ha promovido el Festival de la Modestia y el Velo, a celebrar este mes. Para promover los peinados “iraníes e islámicos”, se imprimirán y repartirán posters como el que aparece en la imagen, con toda la gama de peinados “decentes”, según Jaleh Khodayar, director del festival.

Ante las andanadas de Irán contra el mullet, la revista online Slate ha publicado un interesante artículo sobre la historia del mullet, del que pasamos a reproducir los datos más crujientes:

“Los occidentales empezaron a usar el mullet en Oriente Medio y la antigua Grecia, aunque Alan Henderson, autor de “Locura de Mullet”, se pregunta si los prehistóricos hubieran descubierto las ventajas de llevar el pelo corto en la frente, para dejar libres los ojos, y dejar que crezca por detrás, para proteger el cuello de la lluvia y el frío. Las pruebas arqueológicas confirman la existencia de mullets en civilizaciones antiguas de Mesopotamia, Siria y Asia Menor (…) las estatuas griegas del siglo VI a.C. demuestran que el peinado mullet esta presente en la cultura occidental desde sus inicios”.

Pero la verdadera pandemia del mullet no llegó hasta los años 70 cuando,

Paul McCartney y sus “alas de Pegaso” y la encarnación de David Bowie Ziggy Stardust actuaron como catalizadores del nuevo auge del peinado. Una década después una gran proporción de músicos, actores y atletas adoptaron el mullet como seña de identidad”.

Lo más curioso del caso es que en aquella época el mullet ni siquiera se llamaba así, se llevaba y punto. El nombre se lo dieron nada menos que el grupo de hip-hop Bestie Boys, que en 1994 presentaron su canción “Mullet Head, en la que utilizaban “mullet”, un arcaísmo del inglés de EEUU para definir a alguien más tonto de lo normal. Durante los 90, cuenta Jessica Dweck en Slate, nacieron sites para la recuperación (irónica) del mullet como Mullet Watch, ya desaparecido.

Desde Strambotic proponemos recuperar el mullet como solidaridad con los iraníes que se verán desposeídos de sus propios mullets con esta medida inquisitiva.

Visto en Slate y NY Daily News.

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