Pagar la nómina a los funcionarios le cuesta 2.500 euros al año a cada español

    • Los españoles pagamos 200 euros menos al año que nuestros vecinos europeos por mantener la plantilla de servidores públicos.
    • España es el cuarto país europeo con menor peso del empleo público sobre el total de la población activa.

Oficina de la Agencia Tributaria en Madrid
Oficina de la Agencia Tributaria en Madrid

Seamos realistas. Los funcionarios no gozan de buen cartel en España. Hay excepciones, por supuesto, el CIS refleja la positiva consideración que se tiene de la Policía Nacional, las fuerzas armadas e incluso, últimamente, de los jueces.

Sin embargo, la percepción general sobre la actividad de los servidores públicos en nuestro país no ha variado demasiado desde Larra hasta nuestros días. Se les ve como un colectivo privilegiado, poco eficiente, ajeno a la realidad del mercado laboral y que, sobre todo, tiene la enorme ventaja de no tener que temer por su empleo en una época particularmente convulsa.

Los políticos tampoco han contribuído en exceso a la buena imagen de los empleados públicos entre los españoles. Los funcionarios españoles tardarán en olvidar el desabrido comentario que les regaló el principal responsable gubernamental para lo público, el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, cuando advirtió que eso del cafelito y de leer el periódico se iba a acabar.

No se dice, por el contrario, que el sueldo medio de los empleados públicos en España no llega a los 1.000 euros, que su poder adquisitivo ha caído significativamente más que el de los trabajadores del sector privado en esta crisis o que desde 1982 su salario sólo ha crecido por encima de la inflación en nueve ocasiones.

Otro de los mitos en torno a los funcionarios es la costosa factura que pasan a las arcas públicas. Según el proyecto de Presupuestos de 2014, el Estado gastará el próximo año 15.567 millones de euros en gastos de personal.

¿Es esto mucho o poco? Depende de con qué se compare. La cantidad supone uno de cada diez euros que gastará el Estado en operaciones corrientes el año que viene, equivale a la mitad del gasto disponible por parte de los ministerios y multiplica por cinco los recursos disponibles para la inversión en infraestructuras públicas.

Por otra parte, resulta que el gasto que realiza España en mantener su plantilla de empleados públicos es inferior al que se realiza en la media de los países europeos. Éstos son los datos:

- Cada español debe aportar 2.514 euros cada año para mantener la plantilla de empleados de las Administraciones Públicas del país. La cifra es sensiblemente inferior a lo que les cuesta financiar la nómina de sus funcionarios a nuestros vecinos europeos, se adopte la referencia de la UE.27 (2.737 euros al año) o la Europa del euro (2.983 euros al año)

Salvo en Alemania, donde el coste per cápita es de 2.480 euros, en el resto de grandes países europeos pagar a los funcionarios es más caro que en España. En Francia supera los 4.000 euros, en Reino Unido, los 3.200; y cada italiano debe poner todos los años 2.900 euros para pagar a sus servidores públicos.

- El porcentaje de empleados públicos sobre el conjunto de la población activa es del 13,6% en España, lo que nos sitúa como el cuarto país con menor peso del empleo público de toda Europa sólo por encima de Austria, Portugal y Holanda. Comparemos con el resto de grandes países de Europa: Italia (13,9%), Alemania (14,3%), Reino Unido (20%) y Francia (24,2%).

- En España hay 6,8 funcionarios por cada 100 habitantes. Sólo Portugal, Holanda, Italia y Austria tienen menos, en Alemania hay 7,4 servidores públicos por cada 100 ciudadanos, en Reino Unido, 10; en Francia, 11; y en Dinamarca la cifra se eleva a 17.

Mostrar comentarios