HALLAN RESTOS FÓSILES DE UNA NUTRIA GIGANTE DEL TAMAÑO DE UN LOBO

Un equipo internacional de científicos ha descubierto en la provincia de Yunnan (sur de China) los restos fósiles de una de las especies de nutria más grandes jamás encontradas, la cual tenía el tamaño de un lobo y se alimentaba de grandes crustáceos y moluscos de agua dulce.
Esa especie recién descubierta (‘Siamogale melilutra’) pesaba aproximadamente 50 kilos y pertenece a un antiguo linaje de nutrias extintas que se remonta a al menos 18 millones de años y que se conocía anteriormente sólo a partir de dientes aislados recuperados de Tailandia.
En un trabajo publicado en la revista ‘Journal of Systematic Paleontology’, los científicos señalan que hallaron un cráneo completo, la mandíbula, dientes y diversos elementos esqueléticos en Shuitangba (China), lo cual proporciona información sobre la taxonomía, la historia evolutiva y la morfología funcional de esa nueva especie.
“Aunque el cráneo está increíblemente completo, se aplanó durante el proceso de fosilización. Los huesos eran tan delicados que no podíamos restaurar físicamente el cráneo. Escaneamos el espécimen y prácticamente lo reconstruimos en una computadora”, apunta Denise Su, conservadora y jefa de Paleobotánica y Paleoecología en el Museo de Historia Natural de Cleveland (Estados Unidos).
Esa restauración reveló una combinación de rasgos craneales y dentales parecidos a la nutria y el tejón. De ahí su nombre de especie (‘melilutra’), que reúne en una palabra los términos latinos de tejón (‘meles’) y nutria (‘lutra’).
La nueva especie de nutria gigante tenía una mandíbula grande y poderosa con dientes amplios y con cúspides redondeadas. Estas características parecen haber sido adaptaciones para comer grandes crustáceos y moluscos de agua dulce, que se hallaron en abundancia donde se encontraron los restos fósiles. "De la vegetación y otros grupos de animales que se encuentran en Shuitangba, sabemos que era un lago pantanoso y poco profundo con vegetación bastante densa", apunta Su.
Con este hallazgo, los científicos intentan ahora entender otros aspectos de la vida del ‘Siamogale melilutra’. "El descubrimiento ayuda a resolver algunas preguntas sobre las relaciones de la nutria, pero ha abierto la puerta a nuevas preguntas", subraya Xiaoming Wang, autor principal del estudio, y jefe de Paleontología de Vertebrados del Museo de Historia Natural de Los Ángeles (Estados Unidos), quien se pregunta: "Por ejemplo, por qué era tan grande, cómo rompió moluscos y mariscos para comer, y cómo se movió en el agua y en la tierra".

Mostrar comentarios