Vigo.- El Instituto Español de Oceanografía (IEO) incorporará en breve a su flota un buque, el Ramón Margalef, dotado con la última tecnología en la evaluación de la biomasa marina y que lo convierten en uno de los laboratorios flotantes más avanzados del País y también del mundo, según su director, Eduardo Balguerías.
El Ramón Margalef, botado hoy en Vigo ante la presencia de la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, desarrollará su actividad en el ámbito nacional y mares adyacentes y contará con la tecnología más puntera para estudiar la geología marina, oceanografía física y química, pesquerías y control medioambiental.
El barco, de 46 metros de eslora, captará imágenes en tres dimensiones que permitirán estudiar el comportamiento de los bancos pelágicos, y gracias a su sistema de propulsión diesel electrónica, que lo hacen "particularmente silencioso", apenas resultará invasivo para el medio, ha explicado José Ignacio Díaz, técnico del IEO.
Este aspecto resulta fundamental por su repercusión en la precisión de ciertas labores oceanográficas, tales como la realización de barimetrías, el estudio de la velocidad de corrientes marinas o la medida de la densidad de los lechos.
Su sistema de dobles hélices de cinco alas y un tamaño superior al habitual le confieren mayor margen de maniobra y evitan el denominado fenómeno de cavitación, y su diseño de proa reduce al máximo la formación de olas, turbulencias y burbujas que perjudicarían la labor de observación.
La nave tiene una capacidad para transportar a once investigadores, aparte de doce miembros de la tripulación, aunque el material que vaya recopilando podrá ser analizado en tiempo real también desde tierra gracias a su emisión vía satélite.
El Ramón Margalef, en homenaje al considerado como padre de la ecología moderna, operará a partir del año próximo en las campañas del proyecto "Indemares" de delimitación de las zonas de la Red Natura 2000 en áreas marinas españolas, para lo que se apoyará en el robot submarino Liropus 2000 para las áreas de mayor profundidad.
Pese a que fue botado hoy, el barco no será entregado al IEO hasta julio o agosto, cuando comenzará un proceso en el que los técnicos se familiarizarán con todo el instrumental, y estará plenamente operativo a partir de noviembre.
El plan de renovación de la flota oceanográfica regional del IEO proseguirá con la próxima construcción de un buque gemelo, que llevará por nombre Ángeles Alvariño y cuya entrega está prevista para el año que viene.
Según ha destacado Eduardo Balguerías, director del IEO, el Ramón Margalef viene a satisfacer "una vieja aspiración" de la comunidad científica española, pues incorpora "todos los avances tecnológicos del momento" y se erige como herramienta de trabajo al servicio de la ciencia.
La ministra Cristina Garmendia ha reseñado, por su parte, el "hito histórico" que para el IEO supone la renovación de su flota, para la que el Estado invierte 36 millones de euros, y ha puesto en valor la figura de Ramón Margalef, a quien atribuyó "la conciencia ecológica" que ha ido arraigando en la sociedad en los últimos años.
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