"En EEUU hay más apoyo a los jóvenes", afirma el físico español Pablo Jarillo

  • En Estados Unidos, a diferencia de España, se confía más en la gente joven, que en general es la que "más ganas tiene de trabajar y con las ideas más revolucionarias", ha aseverado el físico español afincado en ese país Pablo Jarillo, quien ha mostrado su preocupación por la financiación de la ciencia española.

Madrid, 22 jul.- En Estados Unidos, a diferencia de España, se confía más en la gente joven, que en general es la que "más ganas tiene de trabajar y con las ideas más revolucionarias", ha aseverado el físico español afincado en ese país Pablo Jarillo, quien ha mostrado su preocupación por la financiación de la ciencia española.

Así lo ha señalado a Efe este experto en grafeno, un material que, ha dicho, "está de moda" por sus propiedades físicas "extraordinarias". Sus investigaciones le permitieron obtener el pasado año en Washington el galardón presidencial para jóvenes científicos.

Jarillo, quien participó recientemente en la Bienal de Física de Valencia organizada por la Real Sociedad Española de Física, ha detallado que una de las principales diferencias entre EEUU y España es que en el primero hay "mucho apoyo a los jóvenes científicos" y en esta confianza "llevan una tradición de décadas".

"Europa y España llevan cierto retraso", ha constatado este investigador.

Además, en EEUU hay una mayor disposición a arriesgarse: "es muy difícil hacer una revolución por un camino establecido".

En cuanto a la ciencia en España, este físico ha relatado que los científicos españoles le han transmitido estos días una "sensación muy pesimista, debido al presente estado de la financiación de la ciencia", y el "riesgo muy fuerte" que existe de retroceder: "espero que no pase, pero el riesgo es real", ha dicho.

Jarillo, de 37 años, desarrolla su actividad investigadora en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), donde es profesor de física desde 2008 y dirige un equipo de 20 personas que investigan las propiedades del grafeno, un material extremadamente fino, resistente y flexible, con multitud de aplicaciones.

En concreto, Jarillo y su equipo analizan cómo conduce la electricidad el grafeno y cómo responden las propiedades electrónicas de este material cuando incide sobre él la luz.

El grafeno, a caballo entre un metal y una sustancia semiconductora como las usadas en transistores, chips y derivados, fue dado a conocer al gran público cuando los rusos Andre Geim y Konstantin Novoselov, que llevaban trabajando una década en este material, fueron distinguidos con el Premio Nobel de Física 2010.

A juicio de Jarillo, en cuanto a investigación básica de este material se está en un nivel intermedio: "se han estudiado bastante las propiedades electrónicas pero las optoelectrónicas menos".

Este experto ha resaltado el campo de los compuestos mecánicos especiales.

"Si añades pequeñas cantidades de grafeno a compuestos mecánicos, por ejemplo a plásticos o material de construcción, sería posible fabricar materiales más fuertes, ligeros y flexibles", ha detallado.

Esto tendrá, por ejemplo, efectos importantes en edificación, cohetes, barcos o coches.

Otro campo donde será importante es el de las baterías y la electrónica.

En cuanto a qué artículo se verá primero en el mercado, Jarillo ha admitido que esto es difícil de predecir: "no soy ingeniero, soy físico", y ha añadido no obstante que ya hay, por ejemplo, raquetas de tenis que incorporan este material, como las de Novak Djokovic.

Hay quien cree que el grafeno supondrá una revolución como la del plástico.

Jarillo tiene en este punto una visión "menos ambiciosa", ya que una cosa son las propiedades físicas del grafeno, "algo extraordinario o más que el plástico y que otros materiales que han revolucionado las tecnologías de la información", y otra cosa es que se pueda emplear de manera más barata a lo que existe ahora.

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