Si Merkel tiene un móvil a prueba de espías, ¿cómo podría EEUU haberlo pinchado?

    • La polémica por el ciberespionaje masivo del Gobierno de EEUU ha ascendido a un nuevo nivel tras conocerse que la NSA podría haber espiado el teléfono de la mismísima Merkel.
    • Te contamos cómo es el actual móvil de la canciller y cómo era el que llevaba cuando presuntamente fue espiada.

Merkel sospecha que EEUU espió su teléfono y pide explicaciones a Obama
Merkel sospecha que EEUU espió su teléfono y pide explicaciones a Obama
D.G.O.

Merkel es toda una gobernanta del S.XXI, adicta al teléfono móvil, eso sí, como herramienta de trabajo. Al menos es la reputación que se ha ganado en Alemania, donde su afición al 'smartphone' le ha valido el peculiar apodo de "canciller móvil". Incluso lo utiliza para comunicarse con los jefes de Gobierno de las naciones vecinas, como confesó el mismísimo Nicolás Sarkozy durante una cumbre de la Unión Europea en 2008.

Y, claro, un aparato por el que pasan tantas confidencias, desde el que se toman decisiones tan cruciales y hasta se abordan cuestiones diplomáticas tiene potencial para ser una auténtica amenaza a la seguridad nacional germana. Por eso recientemente le dieron un móvil nuevo y más seguro, un modelo de BlackBerry bautizado como "el teléfono canciller".

Se trata de una BlackBerry Z10, el último grito de la firma canadiense, pero no es una BlackBerry Z10 normal porque antes de llegar a las manos de la mandataria ha pasado por las de los expertos de Secusmart, una firma alemana dedicada a la seguridad informática.

Como explican en su web, la principal ventaja de este modelo es que permite tres sistemas de comunicación a prueba de espías: chats privados, conversaciones confidenciales y transmisión segura de datos. Así, los miembros del Ejecutivo no tienen que cargar con tres terminales distintos, como sucedía antaño.

Además, Merkel y los miles de altos cargos alemanes que portarán el móvil podrán acceder a las funciones y aplicaciones comerciales normales, las que tiene a su disposición cualquier usuario de a pie, porque el Z10 de Secusmart está dividido en dos circuitos: uno para la encriptación bit a bit de las comunicaciones y otro para el uso convencional.

¿Y por qué os contamos todo esto? Porque también fueron los técnicos de Secusmart los encargados de blindar el viejo teléfono de Merkel, un Nokia 6210 Slide que comenzó a utilizar en octubre de 2009 y que sería el terminal que, según las informaciones filtradas por Edward Snowden, la inteligencia estadounidense habría estado espiando durante cuatro años.

¿Quiere esto decir que aquella vez no hicieron bien su trabajo? Para nada. Según los expertos hay múltiples condicionantes, casi todos inevitables, que hacen que ningún teléfono sea 100% seguro por mucho empeño que se ponga en reforzarlo. En primer lugar, la encriptación de las llamadas y mensajes solo es efectiva si tanto emisor como receptor cuentan con un teléfono adaptado a esta tecnología. De lo contrario, no sirve de nada.

Además, ningún sistema de cifrado es irrompible. De hecho, descifrar un código de encriptación, por complicado que sea, es solo cuestión de tiempo. Y ese tiempo depende fundamentalmente de una cosa: la potencia de computación con la que cuente el 'hacker'. ¿Imaginas lo que se puede hacer con los superordenadores del Gobierno estadounidense?

El teléfono de Merkel ha sido, es y será seguro, de eso no os quepa duda. Lo es su actual BlackBerry y lo era su antiguo Nokia (evidentemente, salvando las distancias). Pero, claro, el abordaje, si se produjo, no lo montó un 'pirata' de agua dulce...

Mostrar comentarios