Una nueva tecnología de Intel para mejorar gráficos y animaciones en videojuegos y simulaciones

  • La nueva técnica se puede emplear en simulaciones que requieran grandes cálculos para la generación de imágenes

Investigadores de Intel han realizado una demostración en los laboratorios de Santa Clara (California) de un nuevo sistema de computación en paralelo con una tarjeta denominada Knights Ferry que sirve, entre otras cosas, para realizar cálculos en paralelo de forma más eficiente, en entornos tales como las aplicaciones gráficas.

Una de las demostraciones fue una técnica de ray-tracing sobre Wolfenstein, un juego de acción ambientado en el que unos soldados se mueven y combaten en escenarios realistas. Utilizando una versión modificada de uno de los escenarios reemplazaron algunos objetos con otros más complejos, con texturas reflectantes, cristales y demás, para que los servidores equipados con las Knights Ferry realizaran los cálculos como si fueran una pequeña «granja de rendering».

En la técnica de ray-tracing el ordenador analiza la trayectoria seguida por cada rayo de luz que impacta en los píxeles de la pantalla, teniendo en cuenta la luminosidad, color y reflejos que ha sufrido en su trayectoria desde los diversos objetos de la escena.

Los cálculos de ray-tracing son un tipo de tareas complejas que aprovecha muy bien la computación en paralelo. En la demosración había cuatro servidores conectados en una arquitectura MIC (Many Intergrated Core) con tarjetas Knights Ferry. Las imágenes calculadas pueden alcanzar sin problemas velocidades del orden de 70 y 80 fotogramas por segundo, más que suficientes para proporcionar una animación fluida. Cada fotograma se puede enviar a PCs o equipos móviles más pequeños, como un ordenador portátil, o un teléfono móvil o una videoconsola.

En la demostración se ve cómo además de las superficies complejas con millones de polígonos creadas con materiales específicos para producir vistosos efectos luminosos (como un gran candelabro o un coche con pintura metalizada) se pueden emplear otras técnicas, como la simulación de partículas para conseguir fuego y otros efectos físicos más realistas. Empleando el ray-tracing es además casi automático poder usar un espejo para obtener instantáneamente una visión alternativa del escenario, o crear un «centro de control» con diversas pantallas/vistas que se actualizan en tiempo real: hacerlo no requiere programación específica, dado que se comportan como cualquier otro «material» de la escena.

Por su precio esta tecnología no está pensada para ser utilizada de momento en videoconsolas o juegos de los ordenador convencionales, pero una buena demo sirve para hacerse una idea de cuán potente podría ser en otros campos. Y quien sabe si en el futuro bajarán los precios y se podrán pedir consolas de videojuegos con tarjetas de este tipo para jugar con gráficos a lo grande.

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