La coreógrafa y bailaora María Pagés (Premio Nacional de Danza a la Creación 2002) volverá a los escenarios madrileños el próximo 7 de abril con 'Yo, Carmen', una coreografía en la que la artista pretende reinventar la 'Carmen' del clásico operístico para presentar a la mujer "como lo que realmente es" y no como "la fantasía de los hombres".
El espectáculo, que se estrenó en el Teatro Calderón en 2014 y, desde entonces, ha recorrido las tablas de países como Singapur, China, Japón, Rusia y Francia, desembarca ahora en los Teatros del Canal para un periodo de tres semanas, del 7 al 24 de abril, y 14 representaciones.
"Estábamos esperando venir a Madrid en un periodo de primavera para estar aquí un tiempo largo --ha explicado la bailaora, en una entrevista con Europa Press--. Es un gran riesgo que asume la compañía, porque son tres semanas a riesgo total de la compañía, pero creo que había que hacerlo. La presencia en Madrid era importante".
Aún así, reconoce que en su gira internacional "han llenado los teatros" y, junto con eso, lo que más les empuja es "la fe en lo que hacen". El sentido del espectáculo, según ha explicado, es que quien vaya a verlo "se emocione" y que las bailaoras "logren conectar y compartir esa ceremonia" con el público. "Que realmente compartamos esa ceremonia juntos, que nos emocionemos juntos y que se vayan con una reflexión", ha especificado.
Una reflexión que, según ha explicado, ha hecho ella misma porque 'Carmen' "llevaba rondándole la cabeza muchos años". "Carmen ha estado presente en mi vida toda la vida. Ese personaje, esa música maravillosa de Bizet ha estado rondándome, pero yo siempre he tenido resistencia, porque yo no creo en ese personaje como representativo de la mujer".
'CARMEN' HOY SERÍA VÍCTIMA DE VIOLENCIA DE GÉNERO
A su juicio, la musa ideada por el dramaturgo francés "es una invención de los hombres, la fantasía de los hombres que inventan a ese personaje para reflejar sus pasiones, sus miserias, sus deseos". "Si ese personaje lo trasladáramos a nuestros días sería una víctima más de la violencia de género. Así de claro", ha asegurado.
Por eso, pese al "color y el aura del mito" de la 'Carmen' de Bizet, se ha mostrado convencida de que "dentro de ese personaje hay un mensaje que no es maravilloso y libre" sino el de una mujer que "por que no quiere seguir con un hombre muere asesinada". "Eso lo vemos todos los días", ha recordado.
En contraposición con la 'Carmen' clásica, la coreografía de Pagés reúne a siete bailaoras (ocho con ella) que realizan coreografías corales y solos sobre la música de Bizet y música original de Rubén Levaniegos, Sergio Ménem y David Moñiz y sobre piezas del repertorio musical popular y clásico que hizo posible la ópera original. Junto a todo ello, los versos en su idioma original de cinco mujeres "universales": María Zambrano, Marguerite Yourcenar, Akiko Yosano, Margaret Atwood y Belén Reyes; y los de María Pagés y su marido, el literato marroquí y "luchador por los derechos humanos" El Arbi El Harti.
"Siempre han sido mujeres, femeninas, luchadoras, y quería que estuvieran ahí y que hablaran en su propio idioma. Ya solo la musicalidad de la poesía es maravillosa, bailar la palabra es como entrar en un mundo rítmico y de contenido maravilloso", ha asegurado.
Según los responsables del espectáculo, a través de la danza, la música y la poesía, la coreografía pretende encarnar a "la mujer real" que "abre su emoción e inteligencia" para "expresar su conocimiento y contradicciones, sus amores y desamor, su fuerza y fragilidad, su inseguridad e insatisfacciones, su soledad, su sensualidad, la igualdad aún no alcanzada, la maternidad".
"La voz femenina reflexiona la rebeldía ante el maltrato femenino, las dependencias como consecuencia de un sometimiento ancestral, respecto a los cánones sociales, las tradiciones, las religiones o las nuevas creencias, como la moda, la publicidad o la propia libertad", explican.
COMPROMISO SOCIAL
Por su parte, Pagés ha confesado que idear y producir esta obra "ha sido toda una experiencia de vida" en la que ha podido "llevar al cante las poetisas que son cantadas por el flamenco" y cumplir su "compromiso" como creadora.
"'Yo, Carmen' tiene un compromiso. Yo, como creadora, tenía que transmitir mi compromiso, y es el de dar la voz a la mujer y que la mujer se vea a sí misma como lo que realmente es y los demás nos vean como lo que realmente somos --ha explicado--. Hombres y mujeres tenemos que luchar juntos por ello. ¿Cómo va a existir la igualdad si no luchamos juntos por ello? Siempre habría un desequilibrio si la lucha fuera en diferentes frentes".
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