Enel registra una contracción del 16,2 % en su beneficio hasta septiembre

Roma, 11 nov.- El beneficio neto del coloso energético Enel se contrajo un 16,2 % en los primeros nueve meses de 2014, un resultado derivado de la caída de los ingresos por venta y transporte de energía y por el tipo de cambio en regiones como Rusia o América Latina, entre otros factores.

En concreto, Enel ganó 1.957 millones de euros durante los primeros nueve meses de este año frente a los 2.335 millones que se embolsó el año pasado.

Su beneficio bruto de explotación (ebitda) fue de 11.608 millones de euros, mientras que en el mismo periodo del año anterior fue de 11.966 millones, según las cuentas aprobadas por el Consejo de Administración, informó Enel en un comunicado.

El beneficio neto de explotación (ebit) fue de 7.155 millones de euros, un 2,7 % menos respecto al mismo periodo de 2013, cuando fue de 7.352 millones de euros.

El consejero delegado de Enel, Francesco Starace, consideró que los resultados "demuestran una 'resiliencia' sustancial del grupo para hacer frente a la duradera incertidumbre asociada al contexto macroeconómico europeo".

Agregó que los resultados de los primeros nueve meses de 2014 también responden al efecto del tipo de cambio en Rusia y Latinoamérica y al impacto de las medidas regulatorias introducidas en España".

En el próximo trimestre, según Starace, el grupo "continuará centrándose en los mercados emergentes y en las energías renovables" y destacó que podrá beneficiarse de las consecuencias de contar con una "estructura organizativa más eficaz".

No obstante, los responsables de Enel insisten en la nota de resultados en la incertidumbre macroeconómica predominante a la hora de prever qué pasará en los próximos meses.

En Italia, Enel constata la debilidad de la demanda energética, con una contracción prevista del 2,9 %, mientras que en España detecta un crecimiento del 0,3 % en datos desestacionalizados.

"Las economías emergentes, por el contrario, continúan registrando índices de crecimiento de la demanda significativos, aunque ligeramente inferiores a las previsiones iniciales", agrega la nota de resultados.

Además, confirma que en los próximos meses "continuará el proceso de racionalización de la estructura societaria ya lanzado por medio de operaciones de compra de participaciones minoritarias en Latinoamérica".

En cuanto al endeudamiento financiero neto del grupo, se situó en los 44.578 millones de euros, un 12,3 % más que en los primeros nueve meses del año anterior, cuando era de 39.706 millones.

A este respecto Starace señaló que la reducción de la deuda continuará siendo "una prioridad para el grupo", de tal modo que prevé que, al final del año, oscile entre los 39 y 40 millones de euros.

También difundieron este martes los resultados consolidados del tercer trimestre del 2014.

En ese lapso de tiempo, el beneficio neto cayó un 58,5 %, hasta los 272 millones de euros, frente a los 655 millones del mismo período del año precedente.

El Ebitda cayó un 2,4 % (3.730 millones de euros) y el ebit se redujo un 5,1 % (2.144 millones de euros), precisó Enel.

Por área de negocio, la península Ibérica y América Latina generaron unos ingresos a Enel de enero a septiembre de 21.959 millones de euros, un 4,9 % menos que en el 2013, cuando registró 23.097 millones.

En cuanto al ebitda fue de 4.536 millones de euros, un 13,6 % menos, y el ebit de 2.442 millones, lo que supone una contracción del 20,2 %.

La producción neta del Grupo en dicho periodo fue de 210,5 teravatios hora (TWh), prácticamente en línea con los que produjo de enero a septiembre de 2013.

En este sentido, Enel dijo que la caída de la producción en países como Chile, mediante Endesa, Eslovaquia y la Península Ibérica estuvo compensada por el aumento en Norteamérica, Colombia y Perú.

Storace además aseguró que próximamente hará un anuncio sobre la central chilena de Bocomina, paralizada desde el pasado diciembre por la Corte Suprema de dicho país por provocar supuestos perjuicios a los habitantes de la zona y a la fauna local.

Un 34,1 % de la energía eléctrica generada por las centrales del coloso en el mundo proviene de fuentes renovables, mientras que un 52% lo hace de fuentes termoeléctricas y un 13,9 % de nucleares.

Por último, el consejo de administración aprobó también la dimisión presentada ayer por el consejero independiente Salvatore Mancuso, justificada con "motivos personales".