Las bolsas europeas siguen sometidas a fuertes dosis de presión. Si la semana pasada el protagonismo se lo llevó Grecia, ahora el punto de mira es Italia. Y es que las dudas sobre la capacidad del Gobierno de Silvio Berlusconi de garantizar la estabilidad de la tercera economía europea, han sido el motor de las caídas en las plazas del Viejo Continente, incluida la española.
"Los problemas políticos helenos parecen haberse parado, pero ahora toda la atención está en Italia. Hasta que no haya una reacción que logre convencer al mercado, seguiremos sin rumbo y a merced de los rumores", explica Iván San Félix, de Renta 4.
En concreto, el Ibex 35 ha terminado la primera sesión de la semana con descensos del 1,4% y en el nivel de los 8.476,40 puntos. Este resultado llega después de que el viernes el selectivo firmara su segunda peor semana de todo el año, tras desplomarse casi un 7%, y está en línea con el que marcaba a primera hora del día.
En la apertura, las bolsas han recibido con pérdidas de entre un 1% y un 2% el acuerdo en Grecia para formar un Gobierno de coalición sin el primer ministro Papandreu y el rumor de que las elecciones helenas podrían celebrarse el 19 de febrero.
Además, las tensiones en el mercado de deuda, donde la prima de riesgo italiana batía récord y la española abría con fuertes subidas, ya hacían presagiar otra jornada de fuertes descensos.
Pero el rumor que se ha propagado por toda Europa de que el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi iba a dimitir daba fuerzas renovadas a los inversores. Una alegría que ha durado poco.
A mediodia, el propio político ha desmentido la información de varios periodistas cercanos a Il Cavaliere, y el mercado ha vuelto a los números rojos. Por si fuera poco, Wall Street avanza con ligeras pérdidas, lo que ha terminado por frenar el intento de rebote europeo.
Así, el Dax alemán ha cerrado con caídas del 0,6%, mientras que el Cac francés se deja un 0,64%, el Ftse británico un 0,38% y el PSI portugués ha cerrado plano. El MIB italiano, en cambio, en cambio, ha conseguido terminar el día con subidas del 1,4%, a la espera de conocer el resultado de la moción de confianza a la que se someterá mañana Berlusconi en el Parlamento.
Desde el mercado de deuda tampoco llegaban buenas noticias: la prima de riesgo italiana ya ronda los 485 puntos básicos, lo que se traduce en un récord, mientras que la española ya está en 385 puntos básicos, cerca de máximos históricos.
Y todo ello a pesar de que el BCE ha anunciado que ha disparado la compra de deuda soberana en la última semana. Según el organismo, la inversión en bonos de la periferia ha superado los 9.000 millones, frente a los 4.000 de la semana anterior.
En cambio, la tranquilidad ha reinado en el mercado de divisas, donde el euro se ha mantenido estable frente al dólar por encima de la cota de 1,37 unidades del billete verde.
De vuelta al Ibex, todo el protagonismo se lo ha llevado el sector financiero, que ha vuelto a ser el más castigado. Santander, por ejemplo, se ha dejado un 2,44%, firmando el segundo mayor descenso de la jornada, mientras que BBVA se ha dejadoun 0,91% y Bankia 0,86%. Pero el mayor recorte se lo aha anotado Iberia, que se ha desplomado un 5,07%.
En el lado opuesto, las mayores subidas las han encabezado Abengoa (+3,86%), Telecinco (+3,24%), Enagás (+2,62%), Caixabank (+2,52%) y Gamesa (+1,70%).
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