Los aliados chinos y árabes de Zapatero dejan tirada a Bankia

  • Todavía se les está esperando. Los fondos chinos y árabes han pasado de largo de la salida a bolsa de Bankia, a pesar de que el presidente del Gobierno aseguró contar con un cheque millonario para las cajas españolas.
Bankia cierra la Bolsa al mismo precio de su debut
Bankia cierra la Bolsa al mismo precio de su debut
Ruth Ugalde

"Si ha venido alguno, a mi puerta no han llamado". Con esta frase, un alto directivo de Bankia negaba ayer cualquier posible inversión de un fondo árabe o chino en el capital de la entidad capitaneada por Caja Madrid y Bancaja.

Todo un golpe a la credibilidad de las promesas del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien, tras varios viajes a China y Oriente Medio, volvió prometiendo que contaba con multimillonarios cheques para las cajas de ahorros. Y Bankia es, indirectamente, la mayor del país.

La suma de sus siete accionistas -Caja Madrid, Bancaja, Segovia, Ávila, Canarias, Rioja y Laietana- ha dado lugar a la tercera entidad española por volumen de activos, y en la cuarta por valor en bolsa.

Pero tanto tamaño ha necesitado una inyección de 4.465 millones de dinero público -la mayor concedida por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria- y otros 1.792 millones, que ha conseguido con su salida a bolsa, para cumplir con los nuevos requisitos de solvencia.

A pesar de estas multimillonarias necesidades, ninguno de los fondos que, según Zapatero, se comprometieron con el Gobierno a respaldar al sector financiero español ha comprado un sólo título de Bankia.

El fallido 'road show' de ZP

Febrero de 2011. Apenas un mes después de que el Ministerio de Economía anunciara un nuevo plan para recapitalizar las cajas, cuyos criterios son más exigentes que el estandar internacional de Basilea III, el presidente del Gobierno anunciaba a bombo y platillo que Catar se había comprometido a invertir 300 millones en las cajas españolas.

Acaba de comenzar el road show de Zapatero, una gira que le llevó hasta China, donde el presidente del Gobierno aseguró haber arrancado el compromiso de China Investment Corporation (CIC), el principal fondo soberano de inversión, para invertir hasta 9.300 millones en el sector financiero español.

La polémica no tardó en estallar cuando, desde el gigante asiático, se desmintió esta información, filtrada por Moncloa. Pero las relaciones diplomáticas terminaron dejando la partida en tablas: China reconoció que estaba interesada en invertir en España, pero sin comprometerse a una cifra concreta.

Una falta de compromiso que ha sido evidente en Bankia, donde ni chinos, ni árabes han acudido a la llamada de Zapatero. ¿Harán lo mismo con Banca Cívica?

Mostrar comentarios