"Era los números uno: con la motosierra y con el vaso en la mano"

El bar Teleclub de Villaluenga de la Vega donde se emborracharon la tarde del sábado los dos fallecidos.
El bar Teleclub de Villaluenga de la Vega donde se emborracharon la tarde del sábado los dos fallecidos.
Iñaki Etxarri

"Eran los números uno con la motosierra, pero también con el vaso en la mano". Un vecino de Villaluenga de la Vega (Palencia), que prefiere quedarse en el anonimato, define así la personalidad de los dos hombres de origen rumano, I.D.e I.P., que murieron el sábado en la casa donde residían después de una ingesta abusiva de alcohol junto a otros cinco compañeros, de la misma nacionalidad, con quienes celebraban... que era sábado, un sábado más de whisky, tequila y cervezas en el Tele Club, el bar del pueblo.

Llevaban algo menos de tres años en Villaluenga de la Vega, una pequeña localidad de la comarca de Saldaña a 65 kilómetros de la capital palentina, y, como tantos otros sábados, llevaban desde después de comer bebiendo sin parar en el bar. Sobre las diez de la noche el grupo, siete personas, se fue a su casa en el número 15 de la calle Dalmás cuando ya estaban todos muy borrachos. Allí se quedaron los dos que estaban más 'pasados', los dos hombres que después fallecerían, y el resto siguió de fiesta por la comarca.Una maratón etílica

Y es que la maratón etílica había empezó a las 4 de la tarde. Inmediatamente después de tomar el café de la sobremesa 'la cuadrilla' comenzó a beber alcohol durante seis horas y después de retarse a ver "quién bebía más". En menos de 60 minutos acabaron con una botella entera de whisky. Toda a chupitos hasta que la joven dueña del bar Teleclub, decidió echar al grupo debido a sus estado de embriaguez.

La dueña del Teleclub explica que el grupo trabajadores de la madera rumanos eran unos habituales del bar y las grandes borracheras del grupo. "Era lo normal. Sus grandes borracheras porque les gustaba mucho beber", dice."Eran buena gente, pero bebían como'cosacos'"

Tanto los fallecidos, como el resto de compatriotas rumanos que compartían el alquiler de la vivienda y trabajaban en la zona, estaban perfectamente integrados en este pueblo: "eran buenas personas, gente muy trabajadora y cumplidora y que nunca había tenido ningún problema en el municipio. Eso sí, los fines de semana bebían como 'cosacos'", asegura un vecino del pueblo.

Como cosacos o... como leñadores, porque los fallecidos y sus compañeros trabajaban en la industria maderera para una empresa leonesa que desarrolla su actividad en la zona de Saldaña.  "Eran muy buenos en la madera, especialmente trabajaban en choperas, en trabajos sacrificados", asegura Raúl Berzosa, el alcalde de la localidad. "Yo les conocía de vista, porque coincidíamos en el bar. A veces les invitaba yo a un café, otras veces ellos. Eran muy majos y nunca habían tenido ningún problema con nadie".

Lo cierto es que el domingo, a la salida de misa, no se hablaba de otra cosa en Villaluenga de la Vega. la noticia de la muerte de los dos ciudadanos rumanos había corrido como la pólvora. Y es que la presencia de la Guardia Civil en el pueblo había alertado a los habitantes de la tranquila localidad palentina.Fines de semana de 'bar y chupitos'

Los vecinos coincidían, igual que apuntaba el alcalde del municipio en señalar que las víctimas estaban integradas en la vida de este pueblo de la Vega. No obstante, su trabajo les hacía estar fuera de casa la mayor parte del día, por lo que no coincidían demasiado con los demás vecinos, excepto, claro está, en sus 'fines de semana de bar y chupitos'. De hecho, algunos vecinos  señalaban lo habitual que era verlos en bares una vez acabado el trabajo. "Bebían muchos chupitos de JB y cervezas en dos o tres horas. A veces, hasta tres botellas entre cuatro", comentaban.

La voz de alarma la habían dado, precisamente, los compañeros de vivienda de I. P. e I. D., que alrededor de las 22:00 horas del sábado les habían dejado en casa, tumbados en un colchón, en estado muy ebrio, y cuando volvieron de su noche de fiesta, alrededor de las 9:00 horas de la mañana del domingo, se los encontraron muertos. En libertad los cinco detenidos por la muerte por intoxicación alcohólica de dos rumanos en Villaluenga https://t.co/79jYL2lI8X pic.twitter.com/tZZNEyI4UH— Así es Palencia (@Asiespalencia) 27 de febrero de 2017

Uno de los dos fallecidos llevaba varios años en Villaluenga, adonde había llegado también su compatriota. Y fueron otros dos compatriotas rumanos que convivían con ellos –parece que durante alguna temporada vivieron hasta siete u ocho personas en la casa, pero los demás se habían trasladado a Saldaña– los que encontraron a sus amigos al llegar a casa de fiesta.El sábado de carnaval acabó siendo trágico

En la vivienda, la Guardia Civil se cercionó de que los dos cadáveres no presentaban signos de violencia y tampoco se encontraron evidencias de que el fallecimiento de los dos hombres pudiera deberse a la inhalación de monóxido de carbono por la mala combustión de una estufa, brasero o caldera. I. P. e I. D. se habían pasado esta vez más de la cuenta en la 'competición' con sus amigos de barra y motosierra para ver quién bebía más. Lo habitual en los fines de semana del grupo, solo que esta vez, el sábado de carnaval acabó siendo trágico.

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