Dirigentes de Podemos admiten "vías de agua" en el partido

Pablo Iglesias dio en la noche de este martes el que quizás sea su mayor golpe de liderazgo hasta el momento. El cese fulminante del secretario de Organización, Sergio Pascual, atribuido a la irregular gestión de las distintas crisis internas ha avivado el debate sobre la situación que atraviesa el partido emergente.

Resistentes a hablar de divisiones, el partido sí admite por primera vez la existencia de “problemas de organización”. Problemas, ha reconocido este miércoles la secretaria de Análisis Político, Carolina Bescansa, que llegan “en un momento inadecuado y que eran evitables”."Pascual no ha hecho el trabajo correcto"

Según Bescansa, Pascual “no ha hecho el trabajo correcto para evitar las dimisiones en bloque” en Madrid, donde nueve miembros del Consejo Ciudadano, afines a Íñigo Errejón, presentaron su renuncia la pasada semana en disconformidad con Luis Alegre, líder del partido madrileño y próximo a Iglesias.

La formación enfrenta en la actualidad brechas abiertas también en otras comunidades autónomas como Galicia o Cataluña.

Bescansa ha cerrado filas con la decisión de Iglesias y ha advertido de que “no deben doler prendas” al tomar iniciativas de este tipo. “Podemos está sometido a mucha presión externa, y no podemos cometer errores”, ha avisado.

Con Bescansa se ha alineado Rafael Mayoral, secretario de relaciones con la Sociedad Civil de Podemos, que comparte el mensaje de “reorganización” pretendido con el cese de Pascual.

Mayoral ha sido más claro al admitir que en Podemos existen “vías de agua”, en referencia a las crisis territoriales, que ha atribuido al hecho de que el partido haya tenido que construirse “a contrarreloj”. “Todos hemos hecho un esfuerzo, incluido Sergio, pero ante esta situación hay que hacer cambios”, ha avisado.Nuevas purgas

Ninguno oculta ya que el partido se encuentra en ebullición. La portavoz de Podemos, Irene Montero, ha avisado este miércoles de que el proceso de reorganización "sigue su curso hasta que los problemas organizativos estén resueltos". Montero es una de las 'manos derechas' de Iglesias.

La diputada ha asumido que la gestión de Pascual fue "deficiente". "Entendemos que cuando hay un problema organizativo, el máximo responsable de afrontar esas situaciones es la secretaría de Organización", ha indicado. Según Montero, el ya exnúmero tres "no ha sido capaz de afrontar los problemas en los territorios". 

Podemos comunicó en la noche de ayer la decisión de destituir a Pascual, en un comunicado en el que señala que "los últimos acontecimientos dan muestra de una gestión deficiente cuyas consecuencias han dañado gravemente a Podemos en un momento tan delicado como es el proceso de negociaciones para conformar un Gobierno del cambio".

Pese a ser destituido, conservará su escaño como diputado.