Luxemburgo, 21 oct.- El Gran Duque Enrique de Luxemburgo recibió hoy al primer ministro en funciones, Jean-Claude Juncker, quien le presentó la dimisión de su gobierno como es tradicional al ser su formación, la democristiana CSV, ganadora de las elecciones celebradas el domingo.
Enrique de Luxemburgo "ha pedido al Gobierno mantenerse en funciones hasta la formación de uno nuevo. El Gran Duque le ha encargado ocuparse de abordar los asuntos corrientes y las materias urgentes que se impongan en materia económica y financiera", señaló la Casa Real en un comunicado.
Juncker, primer ministro de Luxemburgo desde hace casi dos décadas, se impuso en las elecciones legislativas del país celebradas el domingo, aunque registró un ligero retroceso, que benefició a los liberales del DP, que lidera el actual alcalde de la capital, Xavier Bettel.
El CSV logró el 33 % de los votos y se mantiene como la fuerza más votada en el Gran Ducado de Luxemburgo, pero perdió 3 de los 26 escaños que obtuvo en las elecciones de 2009, mientras que los liberales del DP pasaron de 9 a 13 diputados y los socialistas del LSAP mantuvieron sus 13 parlamentarios.
A partir de ahora el jefe del Estado luxemburgués convocará a los presidentes de la Cámara de Diputados saliente y del Consejo del Estado, y a ellos les seguirán los presidentes de los partidos políticos.
El Gran Duque nombrará al formador del nuevo Gobierno, un papel que ya ha reclamado Juncker por ser el ganador de los comicios del domingo.
El "formador" del nuevo Gobierno tendrá que hablar con los jefes de las diferentes formaciones antes de entablar las negociaciones de cara a la formación de una coalición de gobierno, ya que el partido ganador necesita de un socio de gobierno.
Posteriormente la decisión tendrá que obtener la luz verde del Parlamento luxemburgués y el jefe del Estado convocará a la Cámara de Diputados en sesión extraordinaria.
El diario luxemburgués L'Essentiel apunta a que las negociaciones para la formación de un nuevo gobierno "no serán fáciles" y recuerda que, ya en 2009, las conversaciones que dirigió Juncker para formar su gobierno se prolongaron durante 46 días.
La primera tarea que le espera al próximo Gobierno de Luxemburgo es la adopción de los presupuestos para 2014.
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