El TAC de Valladolid inaugura de forma oficial su XVIII edición con un largo aplauso al escritor Fernando Herrero

  • El Laboratorio de Artes de Valladolid (LAVA) ha sido testigo de la inauguración oficial del XVIII Festival Internacional de Teatro y Artes de Calle de Valladolid, TAC 2017, con un largo aplauso al galardonado con el premio especial de esta edición, el escritor y crítico cultural Fernando Herrero.
El TAC de Valladolid inaugura de forma oficial su XVIII edición con un largo aplauso al escritor Fernando Herrero
El TAC de Valladolid inaugura de forma oficial su XVIII edición con un largo aplauso al escritor Fernando Herrero
EUROPA PRESS
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En la inauguración han estado presentes, además de Herrero, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente; la concejal de Cultura y Turismo, Ana Redondo; y el director artístico del TAC, Javier Martínez, además de los miembros del jurado de la sección oficial del certamen.

El festival ha homenajeado así la carrera de este zaragozano que fue fundador, director y profesor en la Escuela de Teatro del Ayuntamiento de Valladolid, además de docente en el Aula de teatro de la Universidad de Valladolid.

Aunque Herrero ha reconocido, en declaraciones recogidas por Europa Press, que la abreviatura 'TAC' no le termina de convencer, ha admitido que este festival ha logrado hacer del teatro una "fiesta colectiva" y ha explicado que para él, cualquier espectáculo teatral se asemeja a una planta verde "efímera" que surge como una "excepción" en un jardín "umbrío".

Sin embargo, como es inherente a su profesión, también ha habido lugar para la crítica, pues, a su juicio, la situación del teatro en Valladolid "no es buena" porque las compañías se encuentran en un momento "delicado" al escasear las representaciones. Todo ello debido a la "crisis galopante" que ha sacudido la Sanidad, la Educación y la Cultura que ha desembocado en una situación "patética", ha agregado el escritor.

Por ello, Herrero confía en que el Festival Internacional de Teatro y Artes de Calle de Valladolid sirva para ampliar el "verdor" de esa planta efímera a toda la vida teatral y se resuelvan los problemas que afronta la cultura.

En último lugar, en un arranque de su pasión por el arte dramático, Herrero ha explicado que el teatro crea ciudadanos "más libres, responsables y menos manipulables" al tiempo que "enriquece" la vida y permite pensar en un mundo nuevo y "utópico".

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