Alejandro Catalán apuesta por capacidad del actor de crear ficción en "Amar"

  • "Es una obra de teatro hecha sobre la posibilidad que tienen los actores de generar teatro desde sí mismos". Así describe "Amar" su director, el argentino Alejandro Catalán, que estrenará mañana el texto por primera vez en España, en el madrileño teatro Pradillo.

Madrid, 17 jun.- "Es una obra de teatro hecha sobre la posibilidad que tienen los actores de generar teatro desde sí mismos". Así describe "Amar" su director, el argentino Alejandro Catalán, que estrenará mañana el texto por primera vez en España, en el madrileño teatro Pradillo.

"Lo particular de mi teatro es eso, que parto de no tener obra, porque hace cuatro años no sabía que iba a hacer una obra de unas parejas que se van un fin de semana a la costa y, en el proceso de esa noche, van descarriando cada una hacia su verdad. Así que 'Amar' es eso, una obra que apuesta por la capacidad puramente actoral de generar ficción escénica", ha contado a Efe su director.

Así, desde mañana y hasta el 22 de junio, dentro del XXXI Festival de Otoño a Primavera de la Comunidad de Madrid, el teatro Pradillo acoge a seis actores, dos sillas, una rama de árbol y un juego de luces y sonidos que los propios intérpretes controlan, según la obra se va desarrollando. Una sencilla puesta en escena pensada sólo para, como ha apuntado Catalán, el "trabajo actoral".

"El mayor desafío del actor en mis obras es asumir el poder que le delego, en el sentido de que lo que sucede pasa por su piel y su voz. No hay acontecimientos de otro orden que vengan a generar soporte dentro del borde de su piel, donde sucede lo que tiene que suceder para que la obra ocurra", ha afirmado el argentino (Buenos Aires, 1971).

Los que pondrán en marcha esta metodología de trabajo de Catalán son los argentinos Ximena Banús, Miguel Ángel Bosco, Edgardo Castro, Florencia Bergallo, Federico Liss y Paula Manzone, intérpretes que pasan por las manos del director siendo conscientes de que son los que "arman el juego de la obra".

Con cuatro años de recorrido en los escenarios argentinos, llegar a Madrid es para el director un "festejo" por poder "mostrar" lo que hacen, pero también ha reconocido que llegan con la "versión más compacta" de todas las que han hecho hasta el momento.

En 2010, "Amar" se alzó con el Premio Florencio Sánchez al mejor director, otorgado por la Asociación de Críticos Teatrales de Uruguay; y tres premios Teatro del Mundo, otorgados por la Universidad de Buenos Aires, en sus categorías de iluminación, diseño sonoro y musicalización.

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