Anthony Blake: Yo no hago trucos, esos los hace el Consejo de Ministros

  • El mago Anthony Blake está "indignado", no solo porque "seis millones de parados no los aguanta nadie" sino por la subida al 21 % del llamado IVA cultural, y ofendido, porque digan que los ilusionistas no hacen magia sino "trucos" y eso, sostiene, es lo que hacen "cada dos por tres" en los Consejos de Ministros.

Madrid, 31 may.- El mago Anthony Blake está "indignado", no solo porque "seis millones de parados no los aguanta nadie" sino por la subida al 21 % del llamado IVA cultural, y ofendido, porque digan que los ilusionistas no hacen magia sino "trucos" y eso, sostiene, es lo que hacen "cada dos por tres" en los Consejos de Ministros.

Blake, que lleva más de 30 años de profesión, prepara una gira por Latinoamérica y viajará a finales de junio a Chicago para reunirse con el grupo de mentalistas al que pertenece, "el más selecto del mundo", 292 miembros que solo se renuevan "cuando muere alguien", explica en una entrevista en "La hora de Luján", programa de EFERadio que dirige y presenta Luján Argüelles.

El artista, nacido como José Luis González en Oviedo (1955), ciudad de la que será el pregonero de las fiestas de San Mateo, está haciendo en España los espectáculos "No vengas sólo" y "Más allá de la imaginación".

En este segundo, detalla, va solo con un técnico en vez de tres porque el 21 % de IVA le ha obligado a reducir "sueldos, hoteles, gastos...".

"¿Cómo no voy a estar indignado?. Estamos hablando de que a nosotros nos han metido el 21 % de IVA y al fútbol y a los toros el 10 %. Es un agravio muy serio", afirma el artista, que produce todos sus espectáculos junto a su "santa esposa", "harta de ver cómo la economía familiar se tambalea" cada vez que se le ocurre "una historia".

Rechaza de plano que lo que hace tenga "truco", porque, puntualiza, lo que tiene es "explicación". "Truco es lo que nos están haciendo cada dos por tres en cada Consejo de Ministros".

Está convencido de que "la gente" agradecería la vuelta de un programa de magia a la televisión, es decir, "los famosos programas de familia que había los domingos por la tarde". Sin embargo, asegura, "los realizadores, productores o directores" encuentran que "la casquería" funciona mejor que otras cosas.

"Tengo una vida muy aburrida: no tengo nada que vender y, aunque lo tuviera, no lo vendería nunca, porque mi vida privada es mi vida privada. Ahora bien, ilusión por hacer televisión tengo toda", declara. EFE

cb/ram

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