Cuba en descomposición y en blanco y negro

  • La Habana, 6 de enero de 1996. Al fotoperiodista italiano Ernesto Bazan se le prohibía impartir sus talleres de fotografía, aludiendo que estaba formando periodistas contra el régimen cubano. El 4 de julio de 2009 tiene que escapar hacia Veracruz (México), con su mujer cubana y sus dos hijos gemelos, Stefano y Pietro.
118 instantáneas que muestran la desolación de Cuba de 1991a 1994
118 instantáneas que muestran la desolación de Cuba de 1991a 1994
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David González / Aviondepapel.tv

Bazan, natural de Palermo y premio Word Press Photo, dejó atrás su segunda vida en Cuba, pero cuando llegó a México recuperó las fotos documentales de su estancia durante aquellos 14 años en La Habana.

BazanCuba es ese libro testimonio, también trasladado a formato audiovisual como documental de media hora. Cuenta la publicación fotográfica con 118 instantáneas, que muestran la desolación de la isla durante el denominado Periodo Especial (1991-1994). Eran los años en que el derrumbe de la URSS llenó de carencias al pueblo cubano y éste tuvo que inventarse de nuevo.

"Ernesto crea un estilo personal en su foto documental, donde la sombra de Robert Frank, las influencias del siciliano Enzo Celerio y sus recuerdos de Cuba nos trasladan a los campos de azúcar, el ejército o nos acerca a jóvenes bailando en las playas", afirmó el fotógrafo Paco Junquera, durante la presentación del libro en la sede de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) y organizado por la Federación de Asociaciones de la Periodistas de España (FAPE).

Este testimonio en blanco y negro de Cuba, en cuya labor de edición participaron 40 estudiantes de los talleres de Bazan, nos aproxima hacia los claroscuros de una etapa de penurias en la isla, pero también hacia la alegría y el estoicismo de los cubanos.

"Para poder retratar la esencia de la isla necesité muchos años. Son fotos que sólo se logran rompiendo el cristal entre el retratado y el fotógrafo. Raramente veo en mis compañeros fotos que hayan roto ese cristal, porque hay que vivir en esos lugares durante mucho tiempo", confesó Bazan durante la presentación de su libro.

El fotógrafo rememora que, para lograr este archivo documentado del Periodo Especial cubano, ha tenido que salir a la calle, convivir con los habaneros y los guajiros del mundo rural cubano. Pero, sobre todo, ser paciente.

"Ha sido un trabajo en continuo progreso (working progress). No tenía prisa. Enfocaba, recuadraba e intentaba sacar la humanidad y honestidad de estos campesinos", resonaba la voz de Bazan en su documental.

El fotoperiodista también afirmó que sus fotos intentan plasmar la devastación de la capital cubana: "La Habana está en un estado de descomposición físico y mental, donde los sueños rotos y la desolación están por todos lados".

Cuando a Ernesto Bazan se le pregunta si volverá a Cuba, recuerda que es marido, padre de dos gemelos y profesor de fotografía. Ahora, dice, su segunda vida, su segunda Cuba, no está en la isla, sino en el continente americano. Si Italia y Sicilia representaron su pasado, para este fotógrafo, Latinoamérica es ahora su presente y su futuro.

"Si fuera por mí, me hubiera quedado en Cuba toda la vida. Mi nueva Habana es ahora Salvador de Bahía, en Brasil. Allí hasta he aprendido portugués", finalizó Bazan.

Sin embargo, "BazanPhoto Publishing, la editorial creada por el fotógrafo, publicará un nuevo libro con sus fotos sobre los guajiros cubanos. El título será "Al campo", un nuevo retrato testimonial.

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