Río de Janeiro, 14 sep.- El bohemio barrio londinense de Camden Town, reducto de artistas, cantantes, punks y de la cultura alternativa, da un sabor británico a la edición brasileña del Rock in Rio, que inspiró su Calle del Rock en las calles de esa zona del norte de la capital inglesa.
La Calle del Rock, una abigarrada vía de 250 metros construida en la Ciudad del Rock de Río de Janeiro, se transformó este año para homenajear al barrio donde residía la fallecida Amy Winehouse.
Las tiendas y bares de la Rock Street recuerdan, con sus fachadas de ladrillo, a los de Londres y, en especial, los de Camden Town por algún detalle loco como los que sólo se puede encontrar en ese sector.
Un autobús de dos pisos, de la línea 13, sale de una fachada, al igual que algunos edificios de Camden, donde automóviles o dragones brotan de los edificios.
No faltan los policías de la Guardia Real inglesa, una típica cabina de teléfono, un pub con "cerveza caliente" -lo que es casi una herejía en Brasil-, ni un balcón donde de vez en cuando aparece un escocés con faldas y gaita.
Un grupo que imita a The Beatles también surge cuando menos se espera en la azotea de una de las casas para sorprender al público al igual que hizo la icónica banda de Liverpool.
La Calle del Rock, que este año ha sido financiada por la Embajada británica, también cuenta con varias atracciones, como una noria y otra de caída libre.
El Rock in Rio comenzó este viernes en Río de Janeiro y se extenderá siete días, entre este fin de semana y el próximo.
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