El vídeo que acelera en seis minutos la desolación y belleza de vivir un año en la Antártida

  • Anthony Powell realizó 10.000 fotografías de la Antártida para su proyecto 'A year on Ice'
Mónica Moyano / Aviondepapel.tv

No ver la luz del sol en cuatro meses, habitar en la parte más fría del planeta y tener una gran afición a la fotografía son algunos de los elementos que propiciaron el proyecto A year on Ice. Realizado por Anthony Powell, este vídeo en time-lapse solapa en más de 10.000 fotografías la experiencia de vivir un año completo en la Antártida.

El video montaje recoge la vida cotidiana en las bases científicas de Mac Murdo (EE UU) y la Base Scott (Nueva Zelanda), lugares en los que se soportan temperaturas que oscilan entre los 20 y 80 grados bajo cero. En verano, en la Base Scott conviven apenas 80 personas, que se reducen a tan sólo 10 habitantes cuando llega el invierno. A tres kilómetros de distancia, en la base MacMurdo, pasan de ser 1.200 residentes estivales a tan sólo 150 con el cambio de estación.

Los investigadores realizan su trabajo sobre todo en verano, cuando la luz del sol brilla las 24 horas del día. La mayor parte de la población emigra con el invierno y los residentes quedan aislados del mundo exterior durante más de seis meses.

Anthony Powell muestra en A Year on Ice el impacto de vivir en estas condiciones tan extremas. Su proyecto, a su vez, consigue documentar imágenes excepcionales de auroras boreales y nubes estratosféricas, así como un interesante testimonio de la noche más larga (cuatro meses sin sol) y de su antítesis, las noches blancas (un cuatrimestre de luz solar permanente).

Tres años después de su opera prima, siete cámaras réflex agotadas y un millón de imágenes más tarde, Anthony Powell colabora con la BBC y se encuentra terminando su primer largo, que verá la luz el próximo mes de diciembre, con la colaboración de Plan 9 Music, estudio que compuso la banda sonora de El Señor de los Anillos.

¿Cómo surge el proyecto de A Year on Ice?

Siempre me ha interesado mostrar el paso del tiempo en mis fotos, desde que muy joven, en 1960, vi la película La máquina del tiempo. Ahora, con la fotografía digital es más sencillo poder hacer este tipo de proyectos, sin necesidad de invertir grandes fortunas en revelados. Este video lo realicé hace tres años para testimoniar la vida en la Antártida.

¿Por qué utilizas la técnica del time-lapse?

La Antártida es un lugar enorme, donde las cosas ocurren muy despacio. Viviendo aquí tienes la sensación de que hay un movimiento silencioso a tu alrededor, pero no siempre resulta posible apreciarlo a simple vista. Con la técnica del time-lapse [fotos montadas en un vídeo, cuya edición acelera las imágenes], al disparar fotografías con intervalos muy cortos de tiempo entre ellas, se aprecia mayor cantidad de información que con fotos independientes o con un video normal.

¿Utilizabas una disciplina para crear imágenes cada día, a horas determinadas? ¿Cómo fue el proceso de creación de A Year on Ice?

A pesar que el proyecto fue pensado de antemano, con idea de mostrar el paso de un año en la Antártida, el rodaje fue más espontáneo. Obedecía sobre todo a la observación del medio ambiente y a reconocer ciertas condiciones que visualmente resultarían interesantes. Para fotografiar escenas con personas tomaba fotos con intervalos de dos segundos; para fotografiar paisajes, utilizaba intervalos más largos, de cinco a 60 segundos, dependiendo de las condiciones climatológicas.

¿Cuáles son las imágenes más bellas que recuerdas?

Algunas de las imágenes más impresionantes las tomé hace unos meses, cuando tuve ocasión de fotografiar unas nubes polares estratosféricas. Estábamos a menos 80 grados bajo cero, los mismos gases que agotan el ozono, cristalizan a esta temperatura y cuando la luz del sol cae sobre estas nubes nacaradas, se puede ver una imagen única, en la que el cielo parece estar en llamas.

¿Y cuál ha sido lo peor de vivir en la parte más gélida del planeta?

Durante el invierno, las temperaturas alcanzan aproximadamente -60ºC donde estamos. Estamos aislados del mundo exterior durante seis meses. Hay un momento en que, incluso, los aviones dejan de volar, así que, si hay algún problema con tu familia de vuelta en casa, no puedes estar allí con ellos.

¿Qué anécdotas recuerdas de la grabación?

Hay ocasiones que he dejado una cámara grabando y luego he tenido problemas para encontrarla de nuevo. A menudo una tormenta estalla y lo cubre todo, enterrando lo que encuentra a su paso. También alguna cámara ha acabado estallando contra las rocas, en mitad de una tormenta de viento. Por otra parte, las cámaras con estas condiciones extremas, aguantan 150.000 disparos, así que he tenido que utilizar siete cámaras distintas. Es un continente duro, pero hay que correr riesgos, si se quieren tomar buenas imágenes.

¿Algún consejo para los lectores que quieran iniciarse en esta técnica de time-lapse?

Sobre todo que salgan y lo intenten, que les resultará muy divertido. También es verdad que hace falta mucha paciencia y hacer muchas pruebas para ver qué funciona. Yo les recomiendo que acudan a este foro, si les interesa investigar más sobre esta técnica y también obtener ayuda.

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