"Heavy Rain" ha demostrado que las diferencias entre los videojuegos y el cine son cada vez menores. Eso ha llevado a muchos a calificar el juego de película interactiva, al combinar una planificación visual comparable a la de cualquier largometraje y una trama, centrada en la vida de cuatro personajes relacionados de una manera u otra con una serie de asesinatos, que varía dependiendo de las decisiones que tome cada persona.
No obstante, sin implicar tan directamente al espectador/jugador como el popular juego para PlayStation 3, la mayoría de los filmes interactivos nos ofrecen la posibilidad de decidir de una manera más guiada y menos directa el desenlace de la trama.
Este tipo de cintas híbridas se encontrarían a medio camino entre la película convencional y la estructura de novelas como "Rayuela", el inmortal libro de Julio Cortázar, o los ejemplares juveniles de "Elige tu propia aventura", donde el lector tiene periódicamente que escoger entre dos opciones que irán determinando el desarrollo y desenlace de la trama.
Sufferrosa
Una de las experiencias más divertidas y experimentales en el ámbito del cine interactivo es la que nos ofrece el director y escritor polaco Dawid Marcinkowski en "Sufferrosa".
El filme, al que se puede acceder a través de sufferrosa.wrocenter.pl, sigue los pasos de Ivan Johnson, un detective que recibe el encargo de encontrar a Rosa von Braun, una mujer que parece vivir en una eterna juventud, gracias en parte al trabajo de su marido, el científico español Carlos Von Braun.
Homenaje a "Alphaville", de Godard, o a "El manuscrito encontrado en Zaragoza" de Jan Potocki, la cinta cuenta con tres finales alternativos, 20 localizaciones, 110 escenas y una banda sonora indie, donde podemos escuchar a Sonic Youth, Tarwater o Stereo Total, entre otros. Todo ello, para ejecutar una nada desdeñable crítica al culto a la belleza y la juventud que reina en nuestro mundo.
Dark Ride
Menos arty y mucho más comercial es "Dark Ride", una película interactiva promocionada por la marca de coches Lexus para lanzar su nuevo modelo CT 200h. En el filme, al que se puede acceder a través de lexusdarkride.com, el espectador/jugador se convierte, junto al actor Norman Reedus, en el protagonista de una virtual huida en automóvil desde el desierto de Nevada a Los Ángeles.
Rodada con unos medios económicos relativamente altos para este tipo de producciones, "Dark Ride" te permite decidir cada cierto tiempo sobre los caminos que debéis tomar tanto tú, así como tu copiloto.
Zombis
La invasión de muertos vivientes que asola la literatura y el cine también ha llegado a las películas interactivas. La más famosa en Internet es "Outbreak". En ella, te conviertes en uno de los miembros de un grupo de humanos que huye de una plaga de zombis.
En el interior de una casa, donde os habéis refugiado de los monstruos, tendrás que decidir cuáles son las mejores opciones para salir vivo del lugar. Sólo tienes que visitar survivetheoutbreak.com para poder vivir la experiencia.
Los no muertos son también los protagonistas de "Deliver Me To Hell", una cinta financiada por un grupo neozelandés de establecimientos de comida rápida. La película sigue los pasos de un pizzero que tiene que llevar un pedido en un mundo devastado por zombis.
El filme, heredero del humor de "Zombies Party" o "Zombieland", nos permite ponernos en la piel del repartidor, que tendrá que hacer lo posible para poder completar su misión: llegar vivito y coleando al lugar donde se encuentra su clienta. Si quieres probar lo que se siente, sólo tienes que pinchar en el siguiente vídeo:
Elige tu propia aventura… en el cine
Aunque la mayoría de las películas interactivas están asociadas a Internet, también existe alguna que se desarrolla para disfrutarla en las salas de exhibición tradicionales. Un caso curioso es el de la cinta alemana "Last Call".
El filme, un slasher movie de consumo adolescente, permite que, a través del móvil, los espectadores puedan guiar a uno de los personajes hacia la salida de un lúgubre manicomio.
La experiencia comienza cuando compramos la entrada del cine y, vía teléfono móvil, enviamos nuestro número de teléfono a una base de datos habilitada especialmente para ello. A lo largo del largometraje, y si somos los elegidos de manera aleatoria por un sistema informático, recibiremos la llamada de la protagonista del filme.
Mediante un sistema de reconocimiento de voz, podremos elegir entre las diversas opciones que nos va dando la actriz. El largometraje variará de una manera u otra según las decisiones que vayamos tomando.
Menos comercial es la película "E-1000", que los cinéfilos españoles pudieron disfrutar en el Festival de Cine de Gijón 2009. Los artistas franceses Djeff Regottaz y Loïc Horellou invitan al espectador a que utilice el móvil como mando a distancia para intervenir en una película de ficción.
Los mensajes y las llamadas de los espectadores se integrarán en una cinta que nos cuenta los problemas que le surgen a un adolescente cuando le implantan un sistema capaz de interceptar las emisiones de los teléfonos móviles. A diferencia de otras películas interactivas en las que la proyección se interrumpe para proponer una opción al espectador, los acontecimientos se suceden sin descanso.
El resultado final de cada proyección es siempre distinto, ya que depende de aquellos mensajes de texto o voz que haya enviado el público asistente.
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