Ellos, los años 80 y la relevancia/irrelevancia de ser "demasiado 'freak'"

Javier Herrero.

Madrid, 19 dic.- "España tiende al rock", lamenta Guille Mostaza, cincuenta por ciento del dúo musical Ellos, que acaba de publicar un disco en el que despliegan, "conscientemente inconsciente", todo su amor por el pop de los años 80, "aunque en España siempre nos haya costado valorarlo".

"Llega un día en que uno se mira al espejo y se pregunta qué quiere hacer sin pretender complacer a ningún sector, sin que importe ser demasiado 'freak'", afirma el músico, que expone sin pudor unos referentes musicales que van de Enrique y Ana en la infancia a Pet Shop Boys en la adolescencia.

Su último álbum, el quinto ya de su carrera y el primero desde "Cardiopatía severa" (2010), es un reflejo tan fiel de esa idiosincrasia musical que comparte con su compañero, Santi Capote, que iba a titularse "Ellos", aunque finalmente optaron por "Pop cabrón".

"Es la primera etiqueta que nos pusimos cuando empezamos en 1999 y nos preguntaban qué música hacíamos. Presumíamos de hacer un estilo que nadie más hacía: letras ácidas, cierto despecho...", explica en una entrevista telefónica.

En él aparece la canción "Extraña melodía", compuesta en compañía de Iván Ferreiro, una guitarra y un par de cervezas.

"Le admiro mogollón. Nunca me gustó su música, pero le conocí como persona y empecé a entenderle. Ahora soy muy fan. Lo de hacer una canción juntos fue idea suya, porque yo me veía eclipsado por él", cuenta.

En las nuevas melodías y en los arreglos de Ellos se percibe el influjo de referencias artísticas de pleno auge en los 80 como Miguel Bosé o Mecano, algo no siempre valorado en este país.

"Cuando no llevas la careta de la trascendencia, te toman como un grupo solo para divertirse", subraya el vocalista de Ellos, quienes evitan los lugares comunes y "livianos" de la música pop actual en sus letras, en pos de "dramas del siglo XXI, que son pequeñas tonterías, pero que, al plasmarlas en canciones, quedan multiplicadas como en el teatro".

De esa intención dan cuenta cortes con títulos tan llamativos como "O tú o él o yo", "Lengua viperina" o "Aunque te rías de mí".

"Nuestra carrera está basada en exponerse a la risa ajena, somos un grupo que no complace bajo ciertos parámetros, porque no hacemos lo que hay que hacer, ni ponemos la cara que hay que poner ni decimos las cosas que hay que decir", afirma.

En el repertorio se incluye la canción "Tu tiempo está acabando", algo que también han oído con mucha insistencia.

"Al final te das cuenta de que pasan más trenes que llevan a otros sitios, también muy interesantes", asegura.

Dice trenes, pero podría decir contratos discográficos, tras su salida de varias compañías. "Pop cabrón" es, tras no encontrar la casa adecuada para ellos, un álbum autoeditado.

"Lo que hemos sacado en claro es que en la industria musical no se trabaja con pasión. La gente se preocupa más de los petardazos numéricos, de las listas... Un grupo como nosotros no es un grupo 'radiofriendly' y no se nos llevó bien, se nos quiso sacar más de lo que se nos daba", critica.

No les va mal llevando las riendas de su carrera. En 2013 ya se presentó "Lengua viperina" en formato digital, "maxi single" y en vinilo y se colocó en el número 1 de iTunes, lo mismo que sucedió cuando tiempo después repitieron la estrategia con otro tema, "Aunque te rías de mí".

Mostaza se construyó entonces su propio estudio en una localidad madrileña, "con una mesa de mezclas analógica gigante" para hacer este disco "a lo grande" y, tras un año de grabación, ya está en la calle, incluso en formatos tan atrevidos para estos tiempos como el del casete.

"Bajo términos comerciales, todo lo que hacemos es contraproducente. Recuerdo que cuando se lo propusimos a nuestro último sello, hace 3 o 4 años, se llevaron las manos a la cabeza, pero a nosotros nos quitan las cintas de las manos", presume.