Gran tarde de Manzanares, que corta dos orejas y "pincha" otras dos

  • Teruel.- El diestro José María Manzanares cuajó una gran actuación hoy en Teruel, al cortar dos orejas y salir a hombros, un triunfo que pudo haber sido mayor de haber acertado con la espada en su primera faena.

Gran tarde de Manzanares, que corta dos orejas y "pincha" otras dos
Gran tarde de Manzanares, que corta dos orejas y "pincha" otras dos

Teruel.- El diestro José María Manzanares cuajó una gran actuación hoy en Teruel, al cortar dos orejas y salir a hombros, un triunfo que pudo haber sido mayor de haber acertado con la espada en su primera faena.

Se lidiaron toros de Parladé, desiguales de presentación, nobles y, aunque bajos de raza y justos también de fuerzas, manejables en conjunto, a excepción del insulso sexto. Los mejores, tercero y quinto.

Manuel Jesús "El Cid", oreja y vuelta tras fuerte petición oreja con bronca "al palco" por denegarla.

José María Manzanares, gran ovación y dos orejas.

Miguel Ángel Perera, oreja y palmas en la despedida.

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MANZANARES LO BORDA

"El Cid" llevó a cabo una primera faena en la que brilló sobremanera en el toreo al natural, con muletazos largos y ligados, despaciosos y limpios. Buena labor del de Salteras, que le valió un trofeo.

Con el cuarto hubo más conjunción. "El Cid" toreó con largura y buen aire al animal, que respondió con suma nobleza aún faltándole "transmisión". Faena correcta del torero sevillano, para el que se pidió la oreja con fuerza, pero que el presidente decidió no conceder.

Perera, que reaparecía tras la cornada que sufrió hace una semana en Burgos, se topó en primer lugar con un toro muy bonancible pero de cortas embestidas con el que se fajó en la distancia corta para instrumentar una faena de mucho temple, pulso y ligazón, sobre todo en el toreo en redondo y en los circulares finales. Cortó una oreja.

El sexto fue el peor del encierro. Toro desrazado con el que Perera lo intentó pero sin que la faena llegara a tomar vuelo.

El primero de Manzanares fue el mejor del envío. Un toro se movió con clase y extraordinaria nobleza en la muleta. El alicantino, fiel a su estilo, cuajó una faena de empaque y parsimonia, con muletazos templados y por abajo, muy encajada la figura, por los dos pitones. Perdió premio por fallar a espadas.

En el quinto vino lo mejor de la tarde. Faena de gran altura, sobre las mismas bases que la anterior: empaque, despaciosidad, regusto y torería. Importante actuación de Manzanares frente a otro toro que embistió con buen son. Esta vez si mató a la primera y paseó el doble trofeo.

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