Juana, la agente secreta que vino de Cuba

  • Se llama Juana, tiene 76 años y vive en una aldea de Lugo; pero no es una jubilada cualquiera, es una exagente secreta que participó en la revolución de Cuba y en la "causa" que llevó al poder a Fidel Castro, el único cubano descendiente de gallegos del que, asegura, se avergüenza.

Carmen Naranjo

Madrid, 25 jun.- Se llama Juana, tiene 76 años y vive en una aldea de Lugo; pero no es una jubilada cualquiera, es una exagente secreta que participó en la revolución de Cuba y en la "causa" que llevó al poder a Fidel Castro, el único cubano descendiente de gallegos del que, asegura, se avergüenza.

Juana Maseda es también el personaje real que, con el nombre de Mariana, protagoniza la novela histórica escrita por Xavier Alcalá y editada por Nowtilus, "Verde oliva", título que alude al color del uniforme que llevaban los que se levantaron contra el régimen de Fulgencio Batista.

Entre ellos Juana, que arriesgó su vida para luchar por la libertad que no llegó a Cuba. "Todo lo que hice y todo lo que pasé para eso", explica a Efe la que fuera agente secreta, que asegura que ni su marido ni sus hijas conocen el "alias" con el que era identificada por otros miembros de "la causa".

Con esas normas funcionaba el Movimiento 26J, del que formaron parte muchos gallegos y descendientes de gallegos emigrados a Cuba.

Y por eso la historia de Juana (o Mariana en la novela) es una más de quienes "trabajaron en la sombra" para el éxito de la revolución y que luego "vieron con gran frustración cómo quedaba aquello por lo que habían luchado, cómo quedaba la libertad" en el régimen castrista, indica a Efe Alcalá.

Xavier Alcalá (Miguelturra, Ciudad Real, 1947) retrata la progresiva integración de Mariana, una joven burguesa con vocación periodística llegada a Cuba en la adolescencia, en un movimiento político y de acción armada frente a Batista tras el golpe de Estado del 10 de marzo de 1952.

La Habana recibe a la joven en 1950, donde tiene una educación laica y vive de una forma acomodada. Tras el golpe de Batista decide formar parte de la revolución y al ser descubierta debe regresar a España, con una cicatriz de bala en un brazo, para huir de una muerte segura antes de que cayera el "batistato".

Desde su Galicia natal, vio cómo triunfaba Fidel Castro. Y también cómo la democracia caía en Cuba y llegaba a España, donde participó en la ampliación de las bases regionales de Alianza Popular.

Hace algunos años, Juana comenzó a escribir sus vivencias en un diario destinado a sus hijas, que pronto alcanzó las 400 páginas. Y conoció a Xavier Alcalá, que reconoce que sin los recuerdos y la documentación de Juana Maseda nunca habría podido relatar las aventuras de Mariana.

"Me explicó lo que no está en los libros de Historia de Cuba y lo contrastó con recuerdos de otros 'antiguos jóvenes' que vivieron como ella el 'batistato' entre 1952 y 1958", afirma Alcalá.

El libro acaba con un "epílogo necesario": una dura carta de esta agente secreta dirigida "a Tintín, Alejandro o Fidel", en definitiva a Castro. Una misiva fechada el 10 de marzo de 2012, "sesenta años después de que comenzase lo que nos unió".

"A mí me sacaron de Cuba para que Ventura -coronel a las órdenes de Batista- no me matase después de arrancarme las uñas y los ojos. Esteban Ventura era tan mal cubano como tu llegarías a ser", reprocha Juana a Fidel Castro.

"Destruiste Cuba. Ahora no es de los yanquis pero tampoco de los cubanos. Es exclusivamente tuya y de unos pocos que fueron a caer en lo de siempre", recalca Juana Maseda, que concluye su carta asegurando a Fidel que morirá con un peso grande en la conciencia: "el de haber ayudado a crecer a un monstruo como tú".

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