La argentina Celina Murga trae a la Berlinale una juventud "revalorizada"

  • Una juventud argentina "revalorizada" llegó a la Berlinale de la mano de la realizadora Celina Murga, que con su documental "Escuela normal" se sumerge en la realidad estudiantil del centro de secundaria del que ella misma fue alumna.

Elena Garuz

Berlín, 14 feb.- Una juventud argentina "revalorizada" llegó a la Berlinale de la mano de la realizadora Celina Murga, que con su documental "Escuela normal" se sumerge en la realidad estudiantil del centro de secundaria del que ella misma fue alumna.

En el filme, rodado en la Escuela Normal 5 de Paraná -la primera de su tipo fundada por Domingo Faustino Sarmiento - presidente argentino entre 1868 y 1874 y artífice de la educación pública en ese país-, se presentan las elecciones al consejo estudiantil como "el eje de interés del documental".

"Mi interés era ver qué pasa hoy con la educación argentina en este marco de esta escuela que fue tan emblemática" y "modelo educativo" por su característica histórica, precisó a Efe.

Según Murga, en la cinta "se juega con dos aspectos"; por un lado "está el análisis del funcionamiento de la institución en sí", y "en los estudiantes y, a través de eso, en esos jóvenes en tanto que son el futuro", agregó.

Por lo tanto, su intención "no era hacer un documental donde se analizara fríamente el funcionamiento de la institución" y se "estigmatizara" la situación en la que se encuentra la educación en Argentina hoy en día, sino "enfocar" las "características positivas" de los jóvenes que allí estudian.

"Cuando empecé a encontrarme con estos chicos, en esta actitud, en seguida sentí que mi objetivo tenía que ser revalorizar a los jóvenes", dijo la cineasta al explicar que cuando comenzaron a filmar desconocían que en el centro se iban a celebrar elecciones al consejo estudiantil, algo que "en seguida cobró mucho protagonismo".

Criticó que en Argentina ocurra que "desde el mundo adulto y los medios hay una tendencia a despreciar o a tildar muy fácilmente a los jóvenes de desinteresados y apáticos".

"Yo creo que eso es un profundo error, por un lado, porque no lo son y, por otro lado, porque les guste o no son el futuro de nuestro país", afirmó.

Del estreno el pasado domingo en la Berlinale, dentro de la sección "Forum", Murga, que participa por primera vez en el Festival Internacional de Cine de Berlín, se llevó un "impacto" positivo.

"La sala estaba llena, quedó gente fuera que no tenía entrada, me impresionó que la mayoría de la gente se quedó para las Q&A (ronda de preguntas). Se dio como un intercambio muy interesante sobre la película", señaló.

Según la cineasta, la gente comprendió que el eje del documental era mostrar las características positivas de la juventud.

"Me parece que eso se vio y de alguna manera eso es universal en cuanto a cómo se les ve, cuál es el lugar que ocupan socialmente. Hay algo de ese tema que también atraviesa las fronteras", agregó.

Por otra parte, se mostró "muy contenta" y "fascinada con el festival", al que "venía con mucha expectativa", pues le habían hablado mucho de la muestra en general y de la sección "Forum" en particular, en cuanto a que se cuida mucho la selección y por el "respeto" y la "historia" que la rodean.

Actualmente, Murga se encuentra en el proceso de casting de un largo de ficción que tiene previsto rodar en la segunda mitad del año y que lleva por título "La tercera orilla".

El guión, que cuenta la historia de un padre y un hijo con un vínculo muy particular, es en el que estuvo trabajando durante una beca con Martin Scorsese, quien es además productor ejecutivo de la película.

Trabajar con el cineasta estadounidense -"una persona muy generosa" y "abierta al diálogo", según la realizadora- fue "muy interesante profesional y humanamente" y una "experiencia de vida".

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