La puesta del pañuelo rojo al Torico pone de fiesta a Teruel

Teruel, 7 jul.- Teruel ha arrancado hoy sus fiestas de "La Vaquilla" con la puesta del pañuelo rojo a la figura del Torico que preside la plaza principal de la ciudad.

Con este acto, que cumple en 2012 sus treinta años de vida, la ciudad vive su fin de semana más festivo, tras más de una semana de celebración de las Fiestas del Ángel.

Manuel Pérez, presidente de la peña El Campanico, ha sido el encargado este año de poner el pañuelo rojo a la figura más emblemática de la ciudad.

Pasadas las 16.30 horas, Manuel ha ascendido por la torre humana formada por su compañeros de peña hasta lo alto de la columna en la que está colocada la escultura del animal y, tras ponerle el pañuelo, ha besado la estatua y ha levantado los brazos al cielo, despertando la euforia de todos los vecinos y visitantes que abarrotaban la plaza.

Poco antes, el alcalde, Manuel Blasco, daba la orden de que sonara el "campanico" como símbolo para que arrancaran las celebraciones.

Lo hacía desde el balcón del ayuntamiento ante las peñas que se congregaban en la plaza del Consistorio para vivir este momento.

Después, el mismo alcalde entregaba el pañuelo bordado que luciría el "Torico" a un miembro de la peña El Campanico, que debía recorrer con esfuerzo el trayecto hasta la plaza.

La presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, ha presidido el acto del Vaquillero de Honor y ha presenciado la puesta del pañuelo desde un balcón de la plaza del Torico.

Horas antes, se han celebrado en el ayuntamiento los actos más oficiales, como la subasta de palcos y el nombramiento del "Vaquillero del Año 2012" a Antonio Blasco.

De este modo comienzan los días más festivos de las celebraciones en Teruel, un fin de semana en el que la ciudad espera duplicar su población y que se vive intensamente con la música en la calle y con la afición taurina, con los toros ensogados recorriendo las calles y en el coso con las corridas y vaquillas y desencajonadas.

La fiesta, que este año está marcada por la sentencia que obliga a los hosteleros a limitar el sonido de la música de las barras, terminará la madrugada del lunes al martes, después de que otro miembro de la peña El Campanico trepe por la columna para quitar el pañuelo.