Los peligros de la obediencia de "Milgram" abren un nueva etapa en el CDN

  • En los años 60, a raíz del juicio al nazi Adolf Eichmann, el psicólogo Stanley Milgram hizo un experimento que puso en evidencia los peligros de la obediencia, una idea que Lola Blasco ha recuperado para "Milgram", la primera experiencia del CDN para impulsar con la práctica en vivo la dramaturgia contemporánea.

Madrid, 4 jul.- En los años 60, a raíz del juicio al nazi Adolf Eichmann, el psicólogo Stanley Milgram hizo un experimento que puso en evidencia los peligros de la obediencia, una idea que Lola Blasco ha recuperado para "Milgram", la primera experiencia del CDN para impulsar con la práctica en vivo la dramaturgia contemporánea.

El director del Centro Dramático Nacional (CDN), Ernesto Caballero, ha explicado hoy que "Milgram" es la primera actividad de su proyecto creativo para ese teatro, una experiencia del Laboratorio Rivas Sheriff "Escritos en la escena" que fomenta la escritura teatral con la propia práctica escénica.

Durante dos meses, ha detallado Caballero, el director y los actores se ponen al servicio del dramaturgo, que, previamente, les ha planteado su "obra en ciernes".

El texto se va elaborando en ese proceso, que incluye dos semanas de exhibición durante las que también se puede modificar la obra.

"Es un apoyo a la dramaturgia pero también un espacio de convivencia entre las distintas disciplinas del ámbito teatral. Es un campo de pruebas y marca una línea del trabajo artístico que se va a llevar a cabo. Al final puede que el CDN pueda producirlo o haya alguna compañía interesada en hacerlo", ha detallado.

Lola Blasco ha explicado que su propuesta, que comenzará a representarse el próximo viernes, es una reflexión sobre la obediencia a la autoridad y la disposición del ser humano a acatar órdenes a partir del experimento Milgram con ciudadanos a los que pidió que infligieran descargas eléctricas "simplemente por que se lo pedían en nombre de la ciencia".

El 75 %, recuerda Blasco, "acabó dando descargas de 400 voltios a inocentes -actores que eran los únicos que sabían la verdad-. Me interesó la idea porque es un tema muy vigente y era una obra de teatro además de un experimento".

"Sus" actores, Delfín Caset, Pablo Huetos, Isabel Rodes y Rodolfo Sacristán, y "su" director, Julián Fuentes, han visto todos sus "trucos" de escritura, "a quién lee y a quién plagia", ha bromeado, pero el proceso ha sido "muy enriquecedor" y espera que el "semimontaje" se convierta en una representación completa.

La propuesta de Blasco es "bastante ecléctica", con momentos de comedia, pero como es joven "e intensa", le va más "lo dramático" y ha sido incapaz de reírse con la idea de que el ser humano, "por ser como es, provoca holocaustos".

"Cuando empecé pensaba que yo sería del 25 % que no daría descargas eléctricas a un inocente si me lo ordenaran y ahora ya no lo se", ha precisado Blasco sobre el descubrimiento del "yo monstruo" que alberga cada ser humano.

El director ha señalado que se trata de un texto "muy armónico" y que lo que se podrá ver el próximo viernes en el Valle Inclán "no será ni una lectura ni una puesta en escena sino una puesta en espacio", que empieza y acaba, y que si necesita modificaciones se incorporarán "al día siguiente".

Además de "Milgram", el Consejo Asesor del CND han elegido ya para la temporada próxima "La comedia que nunca escribió Mihura", de Carlos Contreras, "La ceremonia de la confusión", de María Velasco y "Serena Apocalipsis", de Verónica Fernández.

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