Madonna 'insulta' a sus fans tras ser abucheada por el retraso de su concierto

Madonna 'insultó' y provocó a sus fans después de que el público la abucheara por empezar una hora tarde su actuación de este lunes en Manchester (Reino Unido). La reina del Pop se encuentra presentando su nuevo álbum 'Rebel Heart'y cuya gira, el 'Rebel Heart Tour', pasó por España el pasado mes de noviembre.

"Quiero daros las gracias por esperar. No me gusta llegar tarde, por cierto, y todos vosotros,'bitches' (perras o zorras, en castellano), que seguís quejándoos por ello, cerrad la boca. No estoy ahí detrás comiendo chocolate, limándome las uñas o poniéndome extensiones." Replicó Madonna ante las continuas protestas del personal.

La reina del Pop continuó con sus explicaciones: "El video se rompió, así que tuvimos que esperar hasta que pudimos reiniciarlo. No hay motivos de diva autocomplaciente. Si vosotros, 'divas bitches', queréis seguir con las quejas, entonces no vengáis a mi show".

La artista también se vio obligada a acortar el show, aunque igualmente se pasó de la hora legal establecida en Reino Unido para estos eventos y tendrá que pagar una multa.Madonna y el trato con sus fans

Numerosas bases de fans se autodenominan con distintos apodos en función del artista que siguen. Los más conocidos son los 'Beliebers', fans de Justin Bieber o los 'Little Monsters'con Lady Gaga. Los 'Madders' de Madonna también se autodenominan 'Motherfuckers' (hijos de puta), que es como la diva se dirige siempre hacia los asistentes de sus conciertos.

Madonna se despide igualmente del público al final de todos los conciertos del 'Rebel Heart Tour' con un 'Bye Bitches!!!' desde las pantallas de su escenario, vocablo que ha explotado en este álbum con títulos como 'Bitch, I'm Madonna' o 'Unapologetic Bitch'.

No sería la primera vez que un concierto de la cantante ha sufrido retrasos por causas diversas. El primer concierto que ofreció Madonna en Barcelona el pasado 24 de noviembre comenzó una hora después de la fecha prevista debido a las fuertes medidas de seguridad que se aplicaron tras los atentados de París, aunque ello no provocó la oleada de abucheos que recibió en Manchester.