Más de 13.000 personas en la jornada gratuita del festival con triunfo de Delafé

  • Cambrils (Tarragona).- Más de 13.000 personas, según informaron a Efe fuentes de la organización, asistieron anoche al Cambrirock, festival que celebraba su jornada gratuita con Antonio Orozco como principal reclamo, aunque el triunfo artístico fue para Delafé y Las Flores Azules.

Más de 13.000 personas en la jornada gratuita del festival Cambrirock, con triunfo de Delafé
Más de 13.000 personas en la jornada gratuita del festival Cambrirock, con triunfo de Delafé

Cambrils (Tarragona).- Más de 13.000 personas, según informaron a Efe fuentes de la organización, asistieron anoche al Cambrirock, festival que celebraba su jornada gratuita con Antonio Orozco como principal reclamo, aunque el triunfo artístico fue para Delafé y Las Flores Azules.

Familias enteras, con muchos niños, presenciaron los 90 minutos más bises de Orozco, en pleno "Renovatio tour", que encandiló a la multitud con ese pop-rock aflamencado que le convertirá dentro de poco en el sucesor de Manolo García.

Comunicativo hasta el exceso y conocedor de todos los trucos del oficio, usó e incluso abusó de mil recursos para llegar al público, desde bromas sobre catalanes hasta hablar en catalán, y dejó como recuerdo canciones como "Aire en las espaldas", "Llévatelo", "El viaje", "Paso", "Déjame", "Ya lo sabes", "Qué me queda", "Dime por qué", "Todo lo que no te dije antes", "Es mi momento", "Es mi soledad", "Un poquito de ti", "Pedacitos", "Quiero ser", "Lo que tú quieras soy" y "Yo sé de ti".

En el bis, el tema que compartió con Tamara -"Devuélveme la vida"- y su primer éxito, "Te esperaré", y de vuelta a casa con el coche que una marca comercial ha puesto a su disposición y que tenía aparcado en los bastidores.

Menos populares, pero con mucha más intención musical, fueron Delafé y Las Flores Azules, el dúo que integran Óscar D'Aniello y Helena Miquel, convertidos en septeto en directo con dos vientos -trombón y trompeta-, una guitarrista, un batería y un teclista que disparaba los samplers y los efectos.

Vibrantes, coloristas e imaginativos, aportaron espectáculo en forma de confeti, de sombrillas chinas o del linóleo esparcido por el suelo para que los pies de Óscar se deslizaran en sus ya habituales pasos de baile.

Además, consiguieron una participación del público que rayó en la comunión, y obtuvieron un sonido grueso, muy orgánico, que llenó el recinto de la zona deportiva de Cambrils, donde se celebra el festival -junto al Parc del Pinaret-.

"Dale gas", cantaba Óscar. "Ya le doy", respondía Helena. Y canciones como "La Juani", "El indio", "Gigante", "Lametavolante", "Estaremos muertos", "Mar el poder del mar", "Espíritu Santo", "Enero en la playa" o "La fuerza" se convertían en un bumerán que salía del escenario y volvía a él con la fuerza de miles de gargantas.

Luego fue el momento de Cycle, el grupo de La China Patiño, más preocupada en subirse el vestido para dejar ver su intimidad y en jugar a desnudarse que en otra cosa.

Dos guitarras que no sonaban y un vocalista acompañaban a esta veterana de los tiempos de la movida, pero su propuesta, ese rock orientado hacia la pista de baile, ha sido superada en España por bandas como Cat People, We are Standard o Delorean. Mal asunto cuando lo único que hay en el tintero es la falsa procacidad.

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