Melocos: Nuestro nuevo disco nos quitará la etiqueta de "grupo para chicas"

Lara Olmo.

Madrid, 15 oct.- Los componentes de Melocos se han hecho mayores y quieren demostrarlo con su nuevo trabajo, "Mientras el mundo explota", un disco hecho "sin las prisas" de los anteriores y menos inocente, con el que por fin quieren desquitarse "de la etiqueta de grupo para chicas".

Supone el quinto álbum de este quinteto de gaditanos que encandiló al público joven, y mayoritariamente femenino, con el sonido y las letras de temas como "Cada golpe" o "Cuando me vaya", allá por 2007.

Entonces Jaime (vocalista), Antonio, Gonzalo, Manu y Andrés destilaban una inocencia "propia de la edad" que la experiencia personal y musical les ha enseñado a perder; "si no lo haces, te come", explicaba hoy el líder del grupo durante una entrevista con Efe.

La madurez de Melocos queda patente en la letra de los once temas que componen "Mientras el mundo explota", con la que, aseguran, "se sentirá identificado un público más amplio", que ha crecido junto a ellos.

"Este disco nos va a quitar prejuicios y la etiqueta de 'grupo para chicas", explica Jaime. Etiquetas que les molestan, porque durante todo este tiempo les han impedido demostrar lo que podían ofrecer. Por eso tienen anécdotas como la de los novios de muchas chicas que van "obligados" a sus conciertos, y luego acaban "sorprendiéndose" con lo que escuchan.

El quinteto habla de "crecimiento" para referirse a este trabajo, pero también de "recuperación". Y es que este nuevo álbum recordará bastante a su primer disco, "Melocos", ese que tantas alegrías les dio y que "tenía algo que gustaba especialmente".

El éxito que con él alcanzaron no se ha vuelto a repetir, y tras un periodo calificado por ellos mismos como "turbio", ahora pretenden "recuperar a la gente perdida en estos últimos años".

De esa etapa recuerdan los "momentos de crisis" que hubieron de pasar cuando había que publicar un single fuera como fuera, respondiendo a la premisa de las discográficas: "O suenas o te olvidan".

Ellos saben lo que es hacer canciones con "prisas" y bajo presión, pensando en lo que le gusta "a este o a aquel"; una situación que les tenía "cohibidos" y en la que llegaron a sentir que estaban "perdiendo la esencia".

Circunstancias por las que hay que pasar si eres "joven y estás empezando", pero que acaban superándose cuando, como es su caso, te haces un hueco importante en la música.

Por eso para "Mientras el mundo explota" han impuesto su propio ritmo de trabajo, casi unos tres años, y es el disco que "mejores resultados" les ha dado.

Un título que han extraído de la letra de uno de los temas, "Ahora", y que viene a expresar lo importante de tener un "oasis" en el que refugiarse mientras todo lo demás parece venirse abajo, como ocurre en la actualidad.

Sale a la venta en formato físico y digital el 16 de octubre, pero sólo el primero ofrece la posibilidad de acceder al backstage durante cualquiera de sus conciertos. "hay que vender hasta tu alma si hace falta", afirma Jaime sobre esta nueva forma de promoción.

El digital en cambio incluye dos temas inéditos, maquetas grabadas y producidas por la banda en su local de ensayo.

Este quinto trabajo les ha supuesto además un salto cualitativo importante, ya que les permitirá dejar de ser el "grupo de verano" que toca en las fiestas de los pueblos para emprender su primera gira por salas de toda España, de la que ya tienen cerradas veinte actuaciones.

Un nuevo reto que les ilusiona "muchísimo" pero que no se les ha subido a la cabeza. Son conscientes de que les queda "mucho por hacer" y casi se ruborizan cuando les comparan con Pereza o El Canto del Loco.

Hablar del extranjero supone una meta aún a largo plazo, perseguible cuando se hagan más grandes en España. Su propia casa, el Puerto de Santamaría (Cádiz), es un fortín para ellos en Andalucía, donde, reconocen, la gente es más afín "a otras fórmulas" y se resiste un poco a su música.