P. Milligan, al hospital, un año después de que su hermano fuera corneado

  • Peter Milligan (New Jersey), tiene 42 años, ha hecho 63 carreras durante el último decenio, su hermano fue corneado en los sanfermines el año pasado en una pierna y no impedirá a sus hijos que, si quieren, vengan a Pamplona a correr el encierro.

Pamplona, 11 jul.- Peter Milligan (New Jersey), tiene 42 años, ha hecho 63 carreras durante el último decenio, su hermano fue corneado en los sanfermines el año pasado en una pierna y no impedirá a sus hijos que, si quieren, vengan a Pamplona a correr el encierro.

Así lo ha dicho a Efe este norteamericano en las urgencias del hospital Virgen del Camino de la capital navarra, en las que ha sido ingresado con el tobillo derecho roto tras correr esta mañana el quinto encierro de los Sanfermines 2013, en el que ha caído al ser empujado por otro corredor en el callejón de la plaza de Toros.

Desde la enfermería del coso pamplonés, uno de los más grandes del mundo, Milligan ha sido trasladado en ambulancia hasta el hospital, donde podría ser intervenido esta noche, según ha indicado el corredor.

Milligan es uno de los cuatro heridos que han sido trasladados a centros hospitalarios tras el rápido y peligroso encierro que han protagonizado los toros de la ganadería Torrestrella, cuyos toros en otros encierros han corneado a numerosos corredores.

Uno de ellos fue el también norteamericano Matthew Peter Tasio, quien murió en 1995 al ser embestido por el toro "Castellano", en la plaza del Ayuntamiento de Pamplona.

Agradecido por el trabajo del equipo médico que le ha atendido, que ha calificado de "excelente", ha asegurado que se sentía "en buenas manos" desde la camilla de urgencias, donde estaba junto a otro de los heridos.

"Por supuesto, volveré a Pamplona", ha declarado con determinación el corredor norteamericano, quien considera la rotura de su tobillo como "parte del riesgo" y que hubiera sido peor ser corneado. "Seré el próximo Padilla", ha manifestado entre risas.

Lo ha dicho a sabiendas de lo que es una cornada en los sanfermines, ya que su hermano Ari Deutsch, con el que se encuentra en Pamplona, fue cogido en la pantorrilla por un toro el año pasado y "fue un shock" y "esto (lo que me ha pasado a mí) no es tan malo".

Precisamente, ha sido su hermano quien le ha acompañado en este viaje a Pamplona y, aunque se siente "afortunado" por no haber sido corneado, ha reconocido que está "triste" porque no podrá correr mañana por las calles del casco viejo de la ciudad.

Su madre le ha llamado y está preocupada, al igual que su esposa, con la que ha estado en Pamplona y también sus dos hijos, a los que, según ha explicado, les encantan las fiestas de San Fermín, y que este año se han quedado en New Jersey.

En los encierros de los sanfermines de este año han resultado heridos tres norteamericanos, ninguno por asta de toro.

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