Rakitic, a la sombra de la 'MSN' y a pleno sol con Croacia

En el Barcelona, Ivan Rakitic está acostumbrado a que otros sean las estrellas, especialmente el tridente 'MSN' (Messi-Suárez-Neymar), pero con la selección de Croacia él es una de las grandes figuras, como demostró el viernes ante la República Checa (2-2) y como espera hacerlo el martes ante España.

Ese duelo ante la Roja será especial para Rakitic, que desde 2011 juega en ese país, primero en el Sevilla y desde 2014 en el Barcelona. En el estadio de Burdeos coincidirá con varios compañeros del Barça esta misma temporada (Andrés Iniesta, Sergio Busquets, Gerard Piqué, Marc Bartra, Jordi Alba), con los que ha ganado el 'doblete' nacional de Liga y Copa del Rey.

Con ellos mantiene una especial sintonía personal y el pasado año estuvo en una fiesta de Halloween con Iniesta, Busquets, Alba y Bartra, todos ellos disfrazados de personajes de películas de terror, como compartieron los protagonistas en las redes sociales.

Rakitic es una pieza importante del Barça de Luis Enrique y el croata, ex del Sevilla, tiene clara su función en el engranaje de la máquina azulgrana de la 'MSN'.

"Creo que nunca vi un tridente que consiguiera lo que es capaz el nuestro. Con ellos uno disfruta atacando, defendiendo y ayudándoles a generar ocasiones de peligro", explicó durante esta temporada al valorar lo que siente jugando al lado de Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar.

"Messi es un jugador único, con él se juega mucho mejor", apuntó.

En Croacia, Rakitic no tiene la fortuna de contar con tanto talento en su equipo, pero también cuenta con estrellas como Luka Modric y Mario Mandzukic, que junto a él constituyen el trío de jugadores con más proyección internacional y líderes del vestuario.

Él lo demostró a la perfección el miércoles ante los checos, en un partido marcado por el lanzamiento de una docena de bengalas al terreno de juego, que obligó a interrumpir el duelo en el minuto 86. Los croatas iban ganando 2-1 y tras la reanudación los checos empataron en el descuento de penal.

Rakitic había conseguido el 2-0 provisional para los suyos en el minuto 59, elevando por encima de Petr Cech en un mano a mano tras un pase de oro de Marcelo Brozovic.

Pero no sólo se limitó a eso su aportación. Estuvo magistral en defensa, sólido en la batalla en el centro del campo y rápido en las salidas en velocidad a la contra, hasta el punto de que fue elegido el mejor del partido.

"Creo que nosotros merecimos la victoria, los tres puntos. Si continuamos jugando así y si nos mantenemos unidos como una familia, nadie podrá vencernos", afirmó después del partido ante los checos en una conferencia de prensa en la que tuvo que hablar casi exclusivamente de los incidentes de las bengalas, que exponen a Croacia a sanciones por parte de la UEFA.

Todo un aviso para España, con la que se disputará el liderato del grupo D.

Los españoles, con un pleno de 6 puntos tras derrotar a la República Checa (1-0) y Turquía (3-0), pueden ganar el grupo con un simple empate ante los croatas, que llevan 4 unidades, ya que antes del empate del viernes habían ganado 1-0 a los turcos en el debut.

Con Modric en duda por un problema muscular, que le hizo incluso ser sustituido a la hora de juego contra los checos, Rakitic está llamado a ser más protagonista que nunca ante España, en busca de una victoria que dé el liderato del grupo D a los balcánicos.

En el pasado ya demostró que no se esconde en las grandes citas y suyo fue, por ejemplo, el primer gol del Barcelona en la final de la Liga de Campeones 2014-2015, que los catalanes ganaron 3-1 a la Juventus en Berlín.

Él enseñó el camino y luego siguieron Suárez y Neymar. Ahora quiere repetir la historia y demostrar que el secundario de lujo del Barcelona puede asumir otra vez, sin problemas, el rol de protagonista de una película con final feliz.