Sergio Ramos, el nuevo Fernando Hierro del Madrid

Sergio Ramos parece cada vez más el nuevo Fernando Hierro del Madrid. El ex capitán blanco era capaz de asumir la responsabilidad de sacar el balón y adelantar su posición para ser el cerebro del equipo. Ante el Sporting de Gijón, y ante la baja de Xabi Alonso por sanción, Sahin era el elegido para crear huecos en el autobús que aparcó Clemente en el Bernabéu. Sin embargo, ni el turco ni Khedira fueron capaces de dominar el tempo de juego, obligando a Ramos a ir ganando metros para ser él quien diera ese último pase.

No hay que saber mucho de fútbol para intuir que Clemente plantería un partido a la defensiva ante el Madrid, con dos líneas muy pobladas (cinco defensas y cuatro medios) y muy metidas atrás. Mourinho lo sabía y tenía que elegir entre Sahin y Granero como director de la orquesta blanca. No hubo sorpresas y fue el "Pirata" quien se quedó en el banco y fue el ex del Dortmund el elegido para dirigir al equipo. A su lado, como siempre, un Khedira cuya misión tampoco es la de abrir defensas rivales.

El Madrid jugó muy previsible, sin apenas sorprender a la defensa rojiblanca. Ante tal panorama y sin ningún jugador que le presionara, Sergio Ramos decidió ir adelantándose y comenzar a distribuir juego. Poco a poco, el central fue asentándose en el medio y buscando pases entre los centrales del Sporting. Y a los 36 minutos de partido llegó la recompensa. Un balón colgado por Ramos desde la izquierda dejó sólo a Higuaín ante Juan Pablo y el argentino cabeceó el balón al fondo de la red.

Sabedor de que era el día de Ramos, Mourinho quitó en el descanso a Sahin, dejando sólo a Khedira en el medio, confiando en que el cnetral siguiera jugando de "cinco". El internacional español, aceptó el reto y no dudó en seguir siendo el jugador por el que pasaran todos los ataques blancos. Finalmente, el Madrid acabó llevándose una sufrida victoria ante un Sporting que se preparó para recibir a Ronaldo, Higuaín o Benzemá, pero que no contó con tener enfrente al que puede ser el nuevo Fernando Hierro del Madrid.