Sergio Ramos y Pilar Rubio, las grandes estrellas de los premios 'The Best'

Este pasado lunes por la noche, la FIFA celebró su gran gala anual para premiar a los mejores jugadores de la temporada, los premios 'The Best', que vienen a ser como los Oscar del fútbol. ¿Y esto qué significa? Pues que los futbolistas y sus parejas lucen sus mejores galas sobre la alfombra verde de césped artificial, en este caso. Como de costumbre, hubo una gran representación de jugadores de la liga española, pero solo un único español, y ese fue Sergio Ramos, el capitán del Real Madrid y la Selección que de nuevo repitió como uno de los componentes del mejor 11 de la temporada.

Esta distinción ya la ha recibido el de Camas en años anteriores, lo que supone un reconocimiento a su calidad como futbolista. Este año, la gala se celebró en el Teatro La Scala de Milán, un marco incomparable donde Ramos estuvo acompañado de su esposa desde hace tres meses, Pilar Rubio. 

A diferencia que compañeros como Modric o Marcelo, incluso Leo Messi, la pareja dejó a sus tres niños -Sergio Jr, Marco y Alejandro- en Madrid y acudieron solos a la gala. Y como también suele ser habitual en ellos, fueron las auténticas estrellas de la noche, pues nadie como ellos desfiló sobre esta particular pasarela futbolística.

Porque Pilar y Sergio parecen una pareja de película, y anoche volvieron a hacer gala de su atractivo y su carisma ante las cámaras. Perfectamente ataviados, además. La colaboradora de 'El Hormiguero' estaba espléndida con un vestido dorado de escote asimétrico estilo griego y una abertura en la pierna, que se ajustaba perfectamente a su impresionante silueta. Por su parte, el capitán del Real Madrid optó por un esmoquin negro pero con el toque de la chaqueta en verde botella de terciopelo. Ninguno de los dos looks tiene un pero.

Así, la pareja destacó sobre otros como Marcelo y su mujer, Clarisse Alves, que optó por vestido corto negro con las mangas de tul con topos, o Messi y Antonella Roccuzzo. El elegido mejor jugador del año pasado, a diferencia de otras ediciones anteriores, fue muy discreto con un traje azul marino y corbata negra, mientras que su esposa sí arriesgó más con un vestido de corte sirena con la espalda al aire en tono grisáceo con pedrería. 

Sin duda alguna, los grandes ausentes de la velada fueron Cristiano Ronaldo y Georgina. El luso estaba nominado a mejor jugador y formaba parte del 11 ideal, pero una lesión le impidió estar en Milán. No obstante, Ronaldo cada vez acude menos a estas galas, únicamente va cuando tiene seguro que va a llevarse el galardón. Este año, no estaba en las principales quinielas así que prefirió quedarse en Turín recuperándose.