Más de 60 producciones de 20 países, la mayoría del país anfitrión, Argentina, Bolivia, Perú y Uruguay, se presentan hasta el 24 de enero en Santiago y en otras regiones del país junto a espectáculos musicales y películas sobre el teatro.
"Cumplimos 23 años con el festival y uno de los ejes es sumarnos a los homenajes a Shakespeare. La idea es apropiarnos de Shakespeare y por eso hay producciones bellísimas del autor hechas a la chilena", comentó a la AFP Carmen Romero, directora general del festival.
Así "Sueño de una noche de verano" será interpretada por artistas locales en versos y cuartetas que teñirán con colores chilenos un clásico mundial, en un año que en las artes está marcado por la conmemoración del dramaturgo inglés y de Cervantes.
Asimismo, "Romeo y Julieta" será representada al aire libre en varios puntos de Santiago y cerrará el festival en la céntrica plaza de la Constitución.
Más allá del homenaje a Shakespeare, el festival mantiene su esencia y su principal objetivo que es llevar el teatro doméstico y latinoamericano a la población, apuntó Romero.
"Argentina tiene una presencia muy grande este año", con obras como "Capitán" y "Dinamo" de la compañía Timbre 4 que cruzaron la cordillera para presentarse en el país vecino.
El evento se realiza en enero desde 1994 sin interrupciones con obras en salas convencionales de teatro, parques y calles de la capital chilena.
En su primera edición contó con cinco obras de teatro, pero con el correr de los años se amplió a otras ramas del arte con el objetivo compartido de hacerlos accesibles y llegar a ciudadanos de bajos recursos que habitualmente no acuden a espectáculos artísticos.
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