Barcelona, 19 mar.- La coreógrafa y bailarina Sol Picó ha realizado el espectáculo "Lágrimas de ángel" como "una mirada diferente del arte románico" y pensado para representarse en las salas del Románico del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC).
Sol Picó ha explicado que se trata de "una mirada diferente del arte románico en la que el movimiento y la danza son el punto de partida, pero a los que se incorporan la música y la voz, ideales para trabajar esta historia".
El espectáculo, que se podrá ver en el museo los días 23, 24, 30 y 31 de marzo, comienza con la interpretación de un fragmento del canto de la Sibila y continúa ante el ábside de Sant Joan de Boí, donde se representa el conflicto del Ángel atormentado.
Ante la majestuosidad de Sant Climent de Taüll se representan la veneración y el miedo, inspiradas en esta obra maestra del Románico; y posteriormente las formas escultóricas de los capiteles dialogan con los cuerpos entrelazados de las dos bailarinas.
La coreógrafa ha señalado que en el espectáculo tratan de "buscar el comportamiento humano de la Edad Media", ponerse en la piel de aquella gente "que sufría y tenía tanto miedo, evocar la representación del bien y el mal, del ángel bueno y el malo".
Para Sol Picó, que ya había trabajado para el Guggenheim y el Museo Picasso de Barcelona, esta experiencia "puede permitir atraer a otro tipo de público tanto al museo como a la danza y al teatro".
La música sirve de nexo de unión en este espectáculo itinerante por las salas del Románico: "Desde el inicial canto de la Sibila, que tiene una cadencia apocalíptica, hasta el anónimo del siglo XV 'Amor que tens ma vida', pasando por las improvisaciones a partir de la música tonal de los monjes".
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