"Sólo para dos", una comedia "ácida" y "antiromántica" por San Valentín

  • Reirse del amor y de uno mismo es el principal aliciente que ofrece "Sólo para dos", la comedia de Roberto Santiago que llega a los cines por San Valentín y en la que Santi Millán y la argentina Martina Gusman interpretan a una pareja en crisis después de diez años de relación.

Madrid, 12 feb.- Reirse del amor y de uno mismo es el principal aliciente que ofrece "Sólo para dos", la comedia de Roberto Santiago que llega a los cines por San Valentín y en la que Santi Millán y la argentina Martina Gusman interpretan a una pareja en crisis después de diez años de relación.

"No es un pastelón, es una comedia ácida que pone en duda todo lo que tiene que ver con el amor y la pareja", dijo a Efe su director, un profesional de cuya experiencia en el género dan fe títulos como "El penalti más largo del mundo", un éxito de taquilla, o "Al final del camino".

En "Sólo para dos" la acción transcurre en Isla Margarita (Venezuela), donde Gonzalo (Millán) y Valentina (Gusman) regentan un hotel para parejas en luna en miel. Tanto amor efervescente alrededor no ayuda a mantener viva una relación que se tambalea el día en que Valentina anuncia que se va.

"Todos hemos tenido pareja y hemos vivido crisis. Había algo que me atraía en esa situación, en la que ella se quiere ir, pero no sabe muy bien porqué, sólo sabe que lo que tiene no lo quiere, esa pérdida de pasión", explica Santiago.

"Es muy difícil mantener la ilusión después de diez años, pero entonces, con qué te conformas: la rutina, un proyecto vital, pero al mismo tiempo querer sentir... todas esas cosas son el germen de la historia", añade.

Una historia que, no tiene empacho en reconocer, es de encargo. "Hay grandes películas de la historia del cine que son de encargo", afirma. "A mi me llamó el productor argentino Pablo Bossi para ofrecerme un guión; lo leí, me gustó el germen y lo reescribí hasta que encontramos el equilibrio".

Los referentes, tratándose de una comedia romántica de enredo, son muchos. Santiago menciona una en particular, "Lío en Río", de Stanley Donen, protagonizada por Michael Caine.

"También habla de una pareja de mediana edad en crisis, en un entorno paradisiaco, allí era Río de Janeiro", recuerda. "Los referentes están bien, pero a partir de ahí, intentas poner tu pequeño grano de arena, es tu obligación como director".

"Sólo para dos" es una coproducción de Argentina -donde se estrenó en septiembre pasado-, Venezuela y España, una salida cada vez más frecuente dada la crisis del mercado español y la reducción de las vías de financiación.

"Enrique González Macho (presidente de la Academia de Cine) dijo en los Goya que hacer una película en España es un acto heroico, y tiene toda la razón; desde un punto de vista económico, la rentabilidad de las películas es prácticamente inexistente", admite el autor de "El sueño de Iván".

"Es un milagro hacer una película y un milagro que una película sea rentable, pero aún así soy de los que piensan que merece y mucho la pena hacer cine y contar una historia cuando crees en ella".

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