The Black Keys demuestran en el Lollapalooza que son la banda de moda

  • El dúo estadounidense de blues rock The Black Keys demostró este domingo en la jornada de clausura del Lollapalooza chileno que es la formación de moda con un recital sin contemplaciones centrado especialmente en los dos discos que les han catapultado a la fama mundial, "Brothers" y "El Camino".

Borja García de Sola Fernández

Santiago de Chile, 7 abr.- El dúo estadounidense de blues rock The Black Keys demostró este domingo en la jornada de clausura del Lollapalooza chileno que es la formación de moda con un recital sin contemplaciones centrado especialmente en los dos discos que les han catapultado a la fama mundial, "Brothers" y "El Camino".

Dan Auerbach, guitarrista y cantante, y Patrick Carney, batería, se presentaron en el país austral por primera vez con un repertorio que rondó la veintena de canciones, la gran mayoría de ellas de sus dos últimas creaciones.

Con los cuatro Grammy todavía calientes, entre ellos mejor disco de rock (El Camino) y mejor canción y actuación rock (Lonely Boy), se propusieron cumplir con las altas expectativas creadas por la crítica y el respetable.

La noche arrancó con dos temas de "Brothers" (2010), primero fue el turno de "Howlin' for You" y le siguió "Next Girl", precedido de un fuerte redoble de Carney con la batería.

"Thank you so much, you are amazing", dijo Auerbach, quien no se atrevió con el español en toda la noche, ni tampoco se prodigó mucho con los miles de asistentes.

A los veinte minutos, y tras interpretar "Same Old Thing" de Attack & Release (2008), se hizo el silencio para dar paso a unos acordes más roqueros de "Gold on the Ceiling", de El Camino.

Tras unos cuantos temas de sus discos más actuales, The Black Keys recordó sus orígenes con el tema de amor "Thickfreakness" (2003), de su disco homónimo, y que fue grabado en el sótano de la antigua casa de Patrick Carney.

Directos, con la quinta puesta, y dispuestos a ofrecer todo lo que pudieran en algo menos de una hora y media, encadenaron con celeridad "Girl Is On My Mind" y "Your Touch" hasta llegar a la mucho más lenta "Little Black Submarines" (El Camino, 2011).

Con la chispa que necesitaban las decenas de miles de personas presentes en el Parque O'Higgins, cansados tras dos largos días de rock, el dúo de Ohio les encandiló con "Money Maker" y "Nova Baby" (2011), dos de las canciones más recientes del grupo norteamericano.

"Ten Cent Pistol" y "She's Long Gone", ambas de "Brothers, fueron el aperitivo de la gran esperada de la jornada, el sencillo "Lonely Boy".

El chico solitario y "I Got Mine" (2008) cerraron un concierto marcado por la autosuficiencia de los dos artistas, conscientes de que son la banda de moda en la actualidad y que les hace falta muy poco sobre los escenarios para demostrárselo a la gente.

Con su blues rock franco, directo y melancólico, The Black Keys puso la guinda a la tercera edición del Lollapalooza en Chile, un festival que se está convirtiendo en un referente en toda Sudamérica, tras el paso a lo largo de estos años de bandas como The Killers, Foo Fighters, Pearl Jam o los propios The Black Keys, entre otros muchos.

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