Los zapatos de cristal de la Cenicienta se romperían si se los pusiera en la vida real, fuera de la película de Disney.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Leicester en el Reino Unido han demostrado que es imposible que los zapatos de la chica que robó el corazón del príncipe en el baile hubieran terminado enteros.
Las conclusiones del estudio han sido publicadas en 'Journal of Physics Special Topics', una revista de la Universidad de Leicester interesada que dar a conocer soluciones a problemas originales aplicando las leyes de la Física.
Mediante numerosos experimentos en los que los investigadores midieron el estrés al que se veían sometidos los zapatos.
Finalmente, se concluyó en que la única manera de que no terminaran hechos añicos sería que tuvieran un tacón que no superara los 1,15 centímetros -una medida muy inferior a la que figura en las ilustraciones de la sirviente convertida en princesa.
Los zapatos del cuento llegan a la realidad gracias a Disney, que ha creado su primer modelo de zapatos de cristal.
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