Un juez investigará desaparición obras arte de Muñoz Ramonet y veta su venta

Barcelona, 23 jun.- Un juez de Barcelona ha admitido a trámite la querella de la Fundación Julio Muñoz Ramonet contra las hijas del empresario fallecido y ha ordenado a las principales casas de subastas que impidan la venta de las obras de arte que este legó al Ayuntamiento de Barcelona y que han desaparecido.

La querella se dirige contra la cuatro hijas del acaudalado industrial, que legó sus inmuebles y sus obras de arte al Ayuntamiento de Barcelona, que forma parte de la Fundación Julio Muñoz Ramonet, así como contra las empresas mercantiles Culturarte S.A. Porvemunte S.L. y Grupo Gaudir S.L.

La denuncia acusa a las hijas del empresario de haberse apropiado de parte de la valiosa colección artística de su padre, aunque estas lo niegan e incluso amenazaron con querellarse contra el Ayuntamiento si insistía en sus acusaciones.

En un auto al que ha tenido acceso Efe, el juez entiende que "resulta procedente acordar la admisión a trámite y la práctica de las diligencias esenciales" para esclarecer los hechos denunciados y la identidad "de las personas que hayan podido participar en los mismos".

El titular del juzgado de instrucción número 29, Jordi Lluis de Prada, acuerda informar al fiscal y considera que el delito no está prescrito ya que se trata de hechos nuevos y no los que el fiscal ya denunció en 1986, cuando también hubo una investigación para saber el paradero de las obras de arte desaparecidas de la casa del empresario tras su muerte.

Según el juez, "la conducta que se atribuye a las querelladas se habría consumado recientemente".

El juez también ha oficiado a las principales casas de subastas "para que se abstengan de comercializar cualesquiera de las obras que puedan tener en su poder que aparezca en el listado" del documento que ha aportado el Ayuntamiento de Barcelona con las obras de arte que supuestamente habrían sido apropiadas indebidamente una vez ya estaban legadas al consistorio.

El juez ha acordado citar a declarar a los testigos propuestos por la Fundación para el próximo octubre y ha ofrecido a las cuatro hijas del industrial que puedan prestar su declaración en el juzgado de la ciudad donde residen, Madrid, o si prefieren hacerlo ante él mismo en Barcelona.

La querella acusa a las cuatro hijas del industrial de apropiación indebida y estafa procesal y se presentó después de que el Ayuntamiento reclamase a las hijas el legado no recibido de Muñoz Ramonet, que donó a la ciudad en herencia y que no ha aparecido en los inmuebles de los que el consistorio tomó posesión en julio de 2013.

La familia Muñoz Ramonet siempre ha negado haberse quedado con el legado y ha asegurado que "las herederas no han cometido delito alguno" y "han entregado íntegramente el legado".

Además, aseguran que se "oculta" la discordancia entre lo que "hoy dice el Ayuntamiento que deben entregar las hijas" y lo que el consistorio "dijo que formaba parte del legado en 1998", aunque reconoció que existía una disputa judicial pendiente por dos cuadros.

Según un inventario que el Ayuntamiento de Barcelona hizo público recientemente, faltan 672 obras y objetos artísticos entre pintura y dibujo (367), miniaturas (260), material arqueológico de vidrio (17), esculturas de marfil (20) y esculturas polícromas en madera (8), a las que se deben añadir 181 objetos diversos, con lo cual el total de piezas reclamadas asciende alrededor de un millar.

Entre las ausencia pictóricas destacan "Escena de la vieja tauromaquia", de Eugenio Lucas; "Busto de dama", de Sánchez Coello; "Retrato del Conde de la Nova" y "Retrato de condesa de Figueiro", de Juan Pantoja de la Cruz; así como tablas góticas de maestros como Lluís Borrassà, cuatro obras de Goya, varias de El Greco, Alonso Cano, Ribera, Lucas Giordano, Sorolla o Marià Fortuny.

También reclama el Ayuntamiento "Retrato de Felipe V", de Jacint Rigaud; un retablo gótico de Gonçal Peris, el Tríptico de Santa Caterina de Mateu Ortoneda (siglo XV), "Retrato del emperador Napoleón III de Francia", de Winterhalter; "Olivares", de Anglada Camarasa o "Retrato del cardenal Pascual de Aragón", de Juan Carreño de Miranda.

El abogado de la Fundación Muñoz Ramonet, Marc Molins, ha expresado su satisfacción por el auto del juez y la medida cautelar de advertir a las casas de subastas de comunicar cualquier eventual contacto con las obras litigadas.