Una exposición repasa la figura del crítico y compositor Xavier Montsalvatge

Madrid, 13 sep.- Con motivo del centenario del nacimiento de Xavier Montsalvatge, el Círculo de Bellas Artes acoge desde hoy y hasta el 12 de octubre una exposición que repasa la figura de este crítico y compositor musical, que es, según los responsables de la muestra, "un transcurso de la vida española en el siglo XX".

A su presentación ante los medios han acudido Xavier e Yvette Montsalvatge Pérez, hijos del artista, junto a Elvira Marco, directora general de Acción Cultura Española, coorganizadora de esta muestra que llega a la capital tras su paso por Barcelona y Girona y antes de recalar en el Instituto Cervantes de Nueva York en noviembre.

Montsalvatge hijo ha expresado la "ilusión" que supone para la familia ver esta muestra en Madrid, donde la música de su padre fue muy valorada y donde este gerundense -ha recordado- tenía "buenos amigos, amigos de verdad".

A partir de la creación de sus "Canciones negras" (1945), este admirador de Maurice Ravel relacionado con artistas de la talla de Alicia de Larrocha y Victoria de los Ángeles, se convirtió en una de las figuras más valoradas dentro y fuera de España durante la segunda mitad del siglo XX.

"El violín, la butaca y el piano", título de la exposición, se vertebra en torno a un documental, declaraciones propias y ajenas sobre el artista, un espacio para escuchar piezas suyas, retratos fruto de su relación con artistas plásticos como Manolo Hugué y tres sectores de fotografías que coinciden con tres facetas destacadas de su vida.

Nacido en un medio casi modernista, hijo de banqueros "más aficionados a la cultura que al dinero" -han destacado en la presentación los comisarios Jorge de Persia y Jesús Alvira-, su etapa de aprendizaje encajaría dentro del apartado del "violín", que desechó -según relata él mismo en una de esas declaraciones destacadas- porque era demasiado nervioso.

La "butaca" se refiere "a su lugar favorito en el Palau de la Música", desde donde ejerció una profusa actividad como crítico musical.

Finalmente, el "piano" -como instrumento auxiliar para la composición- permite conocer el trabajo y la obra de Montsalvatge, que realizó "un ejercicio de modernidad constante en su lenguaje, pero siempre distante de las vanguardias".

"Yo no toco el piano nada de nada. Sin embargo, he pasado medio siglo componiendo para piano. Durante mucho tiempo, yo no podía admitir que componía al piano, al menos en Barcelona, donde no estaba bien visto, pero cuando Stravinsky desveló que toda su obra había sido escrita al piano, ya tuve la absolución y pude finalmente confesarlo", reconoció el artista cuando contaba 85 años de edad.