A Coruña, 10 ago.- El director de Viñetas desde o Atlántico, Miguelanxo Prado, hace balance, en una entrevista con EFE, de la XVII edición de este prestigioso salón del cómic, que le ha trasmitido muy buenas sensaciones y en el que la acogida del público fue "abrumadora".
La organización del evento sabía desde el principio que "había un montón de factores que complicaban" su desarrollo, pero los han sabido superar hasta conseguir un resultado sobresaliente.
Prado explica que las obras en la zona fueron decisivas, pues supusieron tener que mover una gran cantidad de elementos del festival" y no se ha podido contar con los espacios habituales, aunque la exposición de viñetas ha estado, como es habitual, en el Kiosko Alfonso.
Pese a estos problemas, al final la afluencia de público se ha mantenido dentro de los parámetros habituales. Incluso el viernes por la tarde y el sábado, con las sesiones de firmas, fue "abrumadora", relata.
Por eso, el salón fue planteado como una edición que forzosamente se tenía que "afrontar, de manera coyuntural, como algo que tenía que funcionar con fórmulas provisionales" y, a pesar de eso, "salió muy bien".
"En lo que se refiere a lo fundamental del festival, que son las exposiciones, las charlas y la feria de libreros, ha estado perfecto", añade.
Los dos momentos que destacan entre los demás están relacionados con el dibujante de "Los muertos vivientes", Charlie Adlard, que tiene una gran cantidad de seguidores, porque su obra está adaptada en la exitosa serie televisiva "The walking dead".
"Sabíamos que en las sesiones de firmas Charlie Adlard sería un problema en sí mismo -bromea-. Las colas de gente fueron inmensas, y siempre es complicado cortarlas, porque es muy difícil explicarle al que le toca que ya no va a poder tener la firma, porque no hay más tiempo; es incómodo tener que hacerlo", argumenta.
Una de sus sesiones, la del viernes por la tarde, puso "el punto divertido" con dos maquilladoras especialistas en cine que disfrazaron, de manera gratuita, a todos los voluntarios y llegó la oportunidad "de ver a todos los chavales disfrazados y maquillados de zombis, le dio un punto tétrico a este salón".
En la edición número dieciocho se espera volver "a la normalidad en cuanto a la disposición física del festival y de sus actividades" aunque hay un objetivo inmediato que está en la red.
"Tenemos por delante una necesidad clara y perentoria, que es la de renovar la página web y su funcionamiento. Este año por razones técnicas que fueron ajenas a la organización y al servidor no se actualizó y no se pudo poner en marcha hasta cuatro días antes de la inauguración. Queremos que quede ya resuelto, será una de nuestras prioridades", señala.
Sobre la programación, de momento "no hay nada pensado" puesto que lo habitual es dejar de plazo hasta diciembre, "también para ver las cosas que van surgiendo", debido a que "en el último trimestre, de octubre a diciembre, salen muchas de las novedades del año de cara a la campaña de Navidad y es fundamental".
"Aspiramos a recuperar esa normalidad e incluso si pudiésemos recobrar alguna de las cosas, como la exposición del Acuario, que este año por una cuestión presupuestaria no se ha podido realizar. Siempre es triste tener que prescindir de algo que había funcionado muy bien y tenía muy buena acogida", termina. EFE
1011038
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios